FUNDAS PARA ABANICOS y un poco de BUDAPEST y de PRAGA.

Por Reyes "el Telar De Mi Abuela"
 Estas fundas para abanicos son casi iguales.




 La persona que me encargó esta la quería con búho y mariposa. Es algo más larga que las anteriores ya que el abanico mide más que los normales.
 Un poco de BUDAPEST.
 He venido muy feliz de mi último viaje por dos ciudades maravillosas.
 He sacado muchas fotos pero en mi retina tengo miles de momentos mágicos de esta increíble ciudad y de mi paseo en barco por el Danubio.
 Los puentes que atraviesan Buda y Pest  son preciosos.

 Otro lugar mágico , sin duda, es el Bastión de los pescadores desde donde se pueden contemplar unas vistas increíbles de Pest y si nos acercamos al aterdecer nos puede dar algo porque la iluminación quita el sentido.
 En ese mismo lugar me encontré con un artista que me fascinó.
 Esta foto la saqué en un pequeño comercio de un pueblecito que me enamoró: Szentendre.
 Si de día me enamoró, de noche me dejó sin palabras.

Un poco de PRAGA.
 Otra ciudad alucinante.
 Llena de torres, parece una ciudad de cuento de hadas.
 El puente de Carlos IV que atraviesa el río Moldava es otra joya.

 Me fascinan los viejos tranvías.
 Esta estatua del escultor  David Cerný  , situada en las Galerías Lucerna, me llamó la atención así como otras de él que se pueden encontrar por toda la ciudad y que merecen la pena verlas.
 Sin lugar a dudas, el barrio de Mala Strana, fue mi rincón preferido de esta ciudad.
Las tiendecitas de marionetas auténticas son una delicia y no las que encontramos en los puestos de souvenirs made in China.El Castillo es otro lugar que me encantó, con su catedral y el Callejón del Oro que es una pequeñísima callejuela con unas casitas muy chiquititas; en una de ellas vivió el escritor Franz Kafka. Este fue otro de mis lugares preferidos.También vengo entusiasmada con las cervezas..¡¡Qué ricas!!!
Si tuviera que elegir entre las dos, me quedo con Budapest a la que me gustaría volver porque me faltaron días para seguir disfrutando de esta ciudad que te envuelve y te atrapa. Volver a tomar un capuchino en el maravilloso café New York, un paseo por la isla Margarita, visitar el barrio judío, etc.Con este pequeño recorrido por estas dos ciudades me despido.¡Sean muy, muy felices!