Galletas integrales de Avena.

Por Unpadrecocinillas
Estas no son las primeras galletas que publico, os deje unas deliciosas de chocolate y otras de chocolate blanco y arandanos, ambas deliciosas, pero que debemos comerlas con ciertas limitaciones, pero las de hoy son además de deliciosas, sanas a más no poder. Junto a las propiedades de la avena, rica en vitamina K y vitaminas del grupo B, especialmente B6 y B1, es muy rica en magnesio y Zinc y muy baja en colesterol.

Además hemos elegido harina integral de trigo para añadirle un extra de fibra. Si prefieres puedes usar harina blanca, también quedan deliciosas. Y en vez de usar mantequilla usamos aceite de oliva virgen extra.
Con estos ingrediente tenemos una galletas que pueden ser ideales para tomar a media mañana o media tarde y llegar asi con menos hambre a la comida o la cena.
INGREDIENTES
230 gr. de copos de avena.
100 gr. de harina integral de trigo.
150 gr. de azúcar moreno.
1/2 cucharadita de levadura (tipo Royal).
1 pizca de sal
2 huevos.
150 ml. de aceite de oliva virgen extra.
1 puñado de pasas.
1 cucharadita de extracto de vainilla (opcional).
ELABORACIÓN
Mezclamos todos los ingredientes secos: los copos de avena, la harina integral, el azúcar moreno, la levadura, las pasas y la sal. Lo mezclamos para que quede todo muy bien mezclado.

En otro cuenco mezclamos los ingredientes húmedos: los huevos, el aceite y la esencia de vainilla. Una vez bien mezclado, juntamos ambas preparaciones hasta que este todo bien integrado, se puede hacer a mano o ayudados por una lengua de silicona. Es mejor no hacerlo a maquina porque se nos romperán demasiado los copos de avena.
Ponemos a calentar el horno a 180ºC y
Mientras hacemos bolitas, más o menos grandes dependiendo del tamaño de galletas que queramos, las aplastamos con la mano y las ponemos en una bandeja de horno cubierta con papel de horno.

Las horneamos a 180ºC durante 15 min, aunque este tiempo va a variar dependiendo de nuestro horno y del tamaño de las galletas, el momento para sacarlas es cuando los bordes se empiecen a dorar. Las dejamos enfriar en una rejilla y listas para disfrutar.
«Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con todas tus fuerzas y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo» Lucas 10, 26