Hoy en el portal de internet Kien&Ke, el periodista Édgar Artunduaga publicó el artículo, “¿Se apagó la memoria de Gabo?”.
Éste es una entrevista a Plinio Apuleyo Mendoza, amigo del escritor, que habla con preocupación sobre el estado de salud de García Márquez, “la última vez que hablamos –dice Mendoza– se le olvidaban ciertas cosas y me preguntaba: ‘¿cuándo llegaste?, ¿dónde estás alojado?’, y repetía. En cambio recordaba cosas de hace 30 o 40 años”. Mendoza cuenta que hace cinco años que no habla con el escritor, pero que cuando lo llamó por teléfono, uno de los hijos de Gabo le dijo, “tiene que verte, si no, por la voz, no sabe con quién está hablando”.
La conclusión que desde su artículo arroja Artunduaga, es el mal de Alzheimer, y la preocupante noticia recorrió hoy la prensa mundial y las redes sociales. Carmen Balcells, agente literaria de García Márquez comentó que lo vio (en sus 85 aniversario), “un poco pachucho (alicaído) de salud”, en la celebración del último cumpleaños. “Quizá porque nos hacemos mayores”, justificó. Dijo que Gabo se ha vuelto cascarrabias y tiene una mirada llena de nostalgia.
García Márquez recibió hace algunos años en EE.UU. un tratamiento contra un linfoma, del cual salió airoso, según dijeron él y su familia. El escritor comentó en su momento que la circunstancia le sirvió para volver al periodismo, regresar a su vicio favorito de la música, poner al día lecturas atrasadas y controlar más su dieta. Aquí parte de la entrevista a Mendoza: Señor Mendoza: ¿Tiene buena relación con Gabo hoy día? Sí. El día que cumplió 85 años (6 de marzo anterior) lo llamé, pero no hablé con él sino con Mercedes. Ella prefiere que no pase al teléfono porque de pronto no reconoce. ¿Es obligatorio, entonces, que le vea sus grandes orejas? Es posible que, como usted dice, si me ve las orejas me reconozca de inmediato. ¿Entonces es cierto que ya no reconoce a nadie? Por la voz ya no reconoce. ¿Y se acuerda quién es Plinio Apuleyo Mendoza? Las últimas veces que hablamos repetía… “¿Cómo estás, cuándo vienes, qué estás haciendo?”. A muchos amigos, con quienes he comentado el asunto, me dicen que con ellos también se limitaba a iguales interrogantes. Entonces hay la sospecha de que simplemente tiene unas fórmulas. Si no reconoce no dice “no sé quién eres tú”, sino que hace unas preguntas genéricas. Me duele mucho esta situación y me inquieta. Gabo siempre ha sido un gran amigo. ¿Se pelearon ustedes con García Márquez por el apoyo de éste a Fidel Castro? Es un problema que hemos tenido toda la vida con Gabo. Lo discutimos con humor. Pero no hay que olvidar y eso no lo sabe casi nadie, que hemos sacado mucha gente de Cuba. ¿Cómo es la cosa? Yo llamo y le digo: “Gabo, ayúdame. Este pobre hombre está preso y condenado a 20 años, ayúdame”. Y él me dice: “Espera, vamos a hacer una cosa”. Así han salido cientos de personas. Gabo ha sacado a mucha gente, inclusive casos visibles como Norberto Fuentes. También pequeños casos. De pronto, encuentro un periodista en Portugal, que me dice: “Caramba, soy cubano, estoy exiliado acá, mi mamá tiene 80 años y me viene a visitar cada dos años, ya no la dejan salir. La voy a perder para siempre. Tú, que eres amigo de García Márquez, por qué no me ayudas”. Llamo entonces a Gabo y le digo “ayúdame” y me dice “dame la dirección y el teléfono de ella” y a los ocho días la señora está en Portugal. García Márquez ha sacado como a dos mil personas. Sin embargo, Gabo se quedó ahí, cosa que me parece un error.
La Paz, (Agencias), Oxígeno
Fuente | eju.tv