Este simpático personaje de la fotografía se llama Georges Perec y era francés. Hasta ayer no había nunca escuchado su nombre y su rostro lo he conocido apenas hace unos minutos. Sin embargo, ayer, un pequeño librito, muy pequeño, con una linda portada con dibujos de color violeta me llamó anoche la atención en una pequeña librería de Santiago, mientras hacia tiempo para ver un poquito de cine (también francés, por cierto: Amour, una pequeña obra maestra).
Triste como estaba decidí mirar en mis bolsillos semivacíos. Tenía plata suficiente para comprar el librito: ¿cena o libro? Libro :-)
Tentativa de agotamiento de un lugar parisino. Decía así la contratapa:
En octubre de 1974, Georges Perec se instaló durante 3 días seguidos en la plaza Saint-Sulpice de París. En distintos momentos del día anotó todo lo que veía: los acontecimientos cotidianos de la calle, la gente, los vehículos, los animales, las nubes, el paso del tiempo. Hizo listados de todos aquellos hechos más insignificantes de la vida cotidiana. En definitiva, nada, o casi nada.
Pero su mirada, de una percepción humana única, vibrante, impresionista y variable -igual que la visión pictórica de Monet frente a la catedral de Ruán-, recogió los mil pequeños detalles imperceptibles que componen la vida de una gran ciudad, de un barrio concreto de una gran ciudad: las innumerables y sutiles variaciones del clima atmosférico, de la luz, de los escenarios, de todo lo que está vivo. Autobuses, perros, transeúntes, turistas. "Lo que ocurre cuando no ocurre nada, solo el paso del tiempo, de la gentes, de los coches y de las nubes".
Un texto magistral en el contexto de la obra de Perec que ha alcanzado en la actualidad el rango de clásico de la literatura.
Hoy me meto en internet, busco a Perec en wikipedia y resulta que estoy ante uno de los más grandes escritores del siglo XX. Y para mis admirados Paul Auster y Roberto Bolagno, "el novelista más grande del siglo XX".
Isabel Allende dice ("mi país inventado"), algo así como que Chile es "una largísima lanza al otro lado de los Andes, donde nadie llega por casualidad". ¿Qué es lo que me espera en Santiago? Por el momento, además de una oportunidad de trabajo, de carambola en carambola, he conocido la obra de Bolagno y de Perec. Por distintos caminos, pero conectadas. Todo, la vida, ..., cada vez me parece más increíble.
Luis Cercós
Santiago, Chile