Hace unos años a mi pequeño ratón de biblioteca se le quitaron las ganas de leer. Los maestros no siempre aciertan con los libros de lectura obligatoria, por aquel entonces mi niño tenia ocho años y en su haber un par de libros muy pesados que leer, aburridos donde los haya incluso para mi. Después de aquello y aunque la maestra lo intento todo para motivarlos, no hubo manera de acercar a la lectura a aquellos alumnos que habían tenido mas que suficiente con aquellos dos libritos.
No me suelo rendir pronto, así que me pasee por la librería, estantería por estantería, hasta que di con el detective Gerónimo Stilton, un ratoncito de lo más resabiado y con una familia de lo más singular, de su mano se conoce Ratonia, y el Eco del roedor y se corren un sinfín de aventuras, con títulos muy atrayentes y un interior muy seductor para los niños.
Aquellos libros pronto se le quedaron cortos, y casi me arruinan, para mi sorpresa sacaron unos libros más gorditos pero que valían más del doble también, mi hijo se había enganchado al ratón de mala forma y sigue enganchado ya que libro que saca al mercado libro que tengo que comprar. No hacia falta un gran despliegue de marketing ni hacerlos más seductores, sin embargo, los nuevos libros con tapas duras y mejores ilustraciones, venían con olores, y si decían que hacia tufo, vaya por dios que si lo hacia, de momento tenemos cuatro por casa y para el santo de mi hijo le cae el quinto, los que se han publicado hasta el día de hoy en la colección de especiales.
Pero no termina ahí también se ha dispuesto a recuperar clásicos de la literatura infantil y juvenil, de momento tiene dos títulos en el mercado, La isla del tesoro, del que mi hijo con esta ya tiene tres versiones diferentes, y la vuelta al mundo en ochenta días que no se para cuando la compraré, porque el ratón campa por las estanterías y por el resto de la casa a su libro albedrío. No he podido hojear todavía ese ejemplar porque lo tengo también reservado para su santo junto con otra de las novedades o no tan novedades porque ya hace casi un año que están en el mercado que son los cómics, que como mi hijo es un gran enamorado de este genero supongo que sabrá apreciar.
Lo del cómic es una de las cosas que me sorprendió, mi hijo empezó a ser lector con este genero que a mi no me apasiona nada, sin embargo, el es capaz de pasar horas enteras con los mismos cómics sobados del principio, y es que cuando aborreció la lectura es lo único que leía y un maestro que había tenido en primer ciclo me comentaba que todo es leer así que si los cómics le atraían algún vinculo lo mantenía atado a la literatura. Yo como siempre lo he considerado un hermano pequeño y poco agraciado, y espero que no me fustiguen los amantes del género por estas declaraciones, no me resignaba, pero no le impedí que leyera lo que le gustaba y sigue siendo lector de cómics. Así que como supondréis también campan en versión dibujada a sus anchas.
Y ahora parece que los superheroes también van a tener en Ratonia su versión, ese debe ser una novedad y ni siquiera la he visto por las librerías, aunque la verdad es que no se muy bien si va a caer por casa porque se esta diversificando mucho este personaje.
Dado el éxito de Gerónimo, otro miembro de la familia, Tea Stilton, dio su salto al estrellato, en un principio mi hijo se resistió a leerlos puesto que los libros son de color rosa, pero después me entere que los lee a escondidas en casa de su amigo que tiene una hermana gemela, y es una gran admiradora de la saga ratonil. El otro día viendo la televisión, fenómeno que se prodiga poco ante mis ojos me di cuenta de que ha dado el salto a la pequeña pantalla, y no me extrañaría que algún día lo hiciera a la gran pantalla, si es que no lo ha hecho ya sin que haya llegado a mis oídos, aunque supongo que mi hijo me hubiera informado, pero quien sabe, igual una cosa es leer, y otra cosa ir a ver dibujos animados, hoy ya tiene once años y hay cosas que le parecen de niños.El sagaz ratón detective tiene su propio Club, y cuenta incluso con libros para preparar en verano el próximo curso escolar. Por lo visto su autor ha encontrado un felón en la literatura infantil, libros que llaman tanto por su exterior, como por su cuidado interior, y sin muchas campañas de marketing se han hecho un hueco muy importante en el mercado. Y tu ya conoces al intrépido ratón y a toda su familia? Tienes niños por casa que lo conozcan? Si no es así, animate a regalarlo a tus hijos, sobrinos o demás niños de tu alrededor la sonrisa esta garantizada