Glenn D. Lowry, director del MoMA II

Por Pilar
Glenn también fue entrevistado por La Vanguardia y Público.
Glenn se saltó hace años una gran 'norma' para los museos: la prohibición de realizar fotografías, cediendo el permiso durante 10 minutos a una pareja que se había conocido delante de ese cuadro y quisieron casarse allí mismo, frente a "La Noche estrellada" de Van Gogh. Su justificación se basa en la emoción (como muchos de los trabajadores de museos) que les transmite la obra, "¿usted no se ha emocionado nunca ante una obra de arte?".
A raíz de este comentario incide en el valor de museo como lugar donde la información se transforma en emoción, y ese momento no lo olvidas jamás. ¡Cuanta razón! Además menciona también la doble concepción de los museos; como lugar de recogimiento y contemplación o como bulliciosa plaza donde el arte se encuentra con la gente y con la vida, como el lema de la última Bienal de Arquitectura de Venecia!
A la hora de coleccionar, ¿cómo coleccionar una performance? Es el formato ideal para ser un anti-sistema, para burlarse de los especuladores y los compradores. Una performance no se puede comprar ni vender, solamente vivir.
"¡Se acabó ir a mirar cuadros! ¡Estamos en el siglo XXI! ¡Todos queremos ser artistas! Hemos pasado de querer ver arte a querer ser arte".
Mencionando la grave situación de los museos españoles ante la crisis anuncia que "si los museos quieren seguir prosperando, tendrán que buscar nuevas fuentes de financiación". ¿Está preparada la sociedad para esto?

El director funciona como un medio entre los patronos y el personal del museo.