Los garbanzos son muy populares en la cocina mediterránea, dan base a famosos platos como el cocido o el potaje madrileño, los garbanzos con espinacas o en vigilia, etc. Antes de cocinarlos necesitan pasar una noche entera en agua con un poco de sal. Como cualidades, presentan un color y un sabor apetitosos, y una forma de avellana que se conserva bien después de la cocción. España es un país de buenos garbanzos como por ejemplo los de Fuentesaúco.
Ingredientes para 4 personas:
1/4 kgr de garbanzosun vasito de arroz4 huesos de espinazo250 gr de morrouna mano de cerdouna oreja4 morcillas de cebolla4 patatas pequeñas un boniato1 diente de ajosal y azafrán de pelo
Preparación:
Ponemos en remojo los garbanzos la noche anterior.En una olla echamos los garbanzos, los huesos de espinazo, la pata hecha cuatro trozos, la oreja partida en trozos y el trozo de morro. Cubrimos todo con agua y lo ponemos a hervir a fuego lento durante 2 horas, y si tenemos que añadirle agua, la tenemos que incorporar caliente.
Yo a la pata le doy un hervor previo para que salga más tierna.
Después echamos las patatas, el arroz y el boniato pelado y partido en trozos, lo dejamos hervir media hora más y le incorporamos un majado con los ajos y el azafrán de pelo. En este momento también añadimos las morcillas, rectificamos de sal, dejamos hervir un par de minutos y apagamos el fuego.
Dejamos reposar unos minutos antes de servir.Si cocinamos esta receta en olla rápida, a los garbanzos y el cerdo le daríamos 30 minutos de cocción, y al resto de la receta le daríamos 10 minutos más. Cuando se abra la olla tras estos últimos 10 minutos de cocción, ponemos las morcillas y el majado y sin cerrar la olla dejamos cocer un par de minutos.
Este plato es de invierno, marida perfectamente con un vino tinto de calidad, y podemos acompañarlo de rábanos, aceitunas verdes partidas etc, etc.