Hacienda ha solicitado a ciertos jubilados que pospongan la realización de su declaración de la renta. Esta petición puede parecer sorprendente y contradictoria, pero tiene una razón principal.
La excepción para ciertos jubilados
Este año, la campaña de la declaración de la Renta ha comenzado con ciertas particularidades que afectan especialmente a un grupo de jubilados. Este grupo, que incluye a quienes hicieron aportaciones a antiguas mutualidades, se enfrenta a una situación específica que requiere atención.
El inicio de la campaña y las fechas clave
Con el inicio de abril, la Agencia Tributaria puso en marcha la campaña para la declaración de la Renta, inicialmente de forma online. Sin embargo, para este grupo específico de jubilados, la recomendación ha sido esperar hasta después del 20 de abril para presentar su declaración.
¿Qué deben saber los jubilados afectados?
El 3 de abril, Rosa Prieto, directora del Departamento de Gestión Tributaria, explicó en rueda de prensa que se había recibido nueva documentación sobre las aportaciones a las mutualidades por parte de la Seguridad Social. Debido a la necesidad de depurar y verificar estos datos, se aconsejó a los jubilados afectados no presentar su declaración hasta no contar con toda la información ajustada y actualizada.
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El impacto de las sentencias recientes y los ajustes fiscales
Todo viene de una sentencia del Tribunal Supremo en 2023 que ha cambiado el panorama para los jubilados que hicieron estas aportaciones en el pasado. Ahora, podrán deducirse en la declaración de la Renta la parte correspondiente a esas aportaciones. Esto significa que la Agencia Tributaria debe ajustar sus sistemas para aplicar estas deducciones automáticamente.
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Otras novedades de la Renta 2023 para los jubilados
Aparte de esta petición de retraso en la declaración, los jubilados tienen que tener en cuenta más novedades en la Renta 2023. Los pensionistas con ingresos anuales inferiores a 12.900 euros están exentos de declarar y pagar IRPF. Este límite se aplica a la pensión pública y otras rentas, como intereses de cuentas o dividendos.
Ten en cuenta también que si eres mayor de 65 años y has vendido tu vivienda habitual, no tributan por ganancias patrimoniales derivadas de su venta.