En una revisión post-Gran Premio, Mercedes descubrió que la caja de cambios del coche estaba dañada, desconociéndose por el momento qué pudo causar ese deterioro, y el equipo decidió, en una inspección en la jornada de ayer, reemplazarla por una nueva en vez de arriesgarse a una rotura en China.
Según un portavoz del equipo, la decisión se debe a que, de entre los próximos circuitos que visitará la Fórmula 1, el de Shanghai es el más propicio para los adelantamientos, lo que facilitaría la labor de remontada de Hamilton más que, por ejemplo, Sochi, Montmeló o Mónaco.
Todo esto supone que Lewis Hamilton no saldrá desde la pole position en China, un trazado en el que ningún coche se ha interpuesto entre él y el semáforo en las últimas tres temporadas, y en el que ha obtenido la pole un total de 5 veces, su récord personal junto a Hungría y Australia. Quedará por ver si será capaz de recuperar terreno para frenar la racha de 5 victorias consecutivas de su compañero y evitar que el campeonato se le complique antes de tiempo.