La relaciones de pareja y más cuando convivimos con ella o él, es un mutante insaciable capaz de devorar todo a su paso y en proceso de cambio constante.
Esta triste e inevitable realidad es la que nos muestran los realizadores Yonni Aroussi y Ben Genislaw en “Happily Ever After”. Pero a no deprimirse, que siempre hay posibilidades de ganar la lotería.