Helado de plátano con fruta y avena

Por Eulàlia

Así como las gachas de avena se convirtieron en uno de mis desayunos básicos durante el invierno, creo que el helado de plátano va a ser mi desayuno favorito este verano. Es súper fácil de hacer, sólo necesitas plátanos y está buenísimo así que lo tiene todo. Le gusta a casi todo el mundo y además se puede adaptar añadiéndole más ingredientes para hacer helado de chocolate o de plátano y frutos rojos.

Desde que aprendí a hacer este tipo de helados los hago durante todo el año aunque eso no significa que no me coma un helado normal en una heladería de vez en cuando. Todo está en el equilibrio y estos también están buenísimos y son mucho más sanos.

Para convertirlo en un desayuno completo le he añadido copos de avena y fruta pequeña para acompañar. Me encanta mezclarlo todo e ir encontrando los trocitos mientras lo como. A veces le añado también bayas gogi, semillas de chía, frutos secos o lo que tenga por casa y no miento cuando digo que está bueno con cualquier cosa que le pongas.

Últimamente intento tener siempre un plátano en el congelador como mínimo y cuando uso uno ya pelo y corto el siguiente. En muchas fruterías incluso ponen de oferta los plátanos más maduros así que si no tenéis siempre podéis intentar conseguir un buen pack y congelarlos todos de golpe.

Espero que os guste la idea 🙂

Ingredientes:

  • 1 plátano congelado
  • Leche de avena
  • Frambuesas
  • Arándanos
  • Copos de avena

Instrucciones:

La noche anterior o mínimo 4 horas antes pelamos, cortamos y congelamos un plátano.

En una batidora trituramos el plátano con un poco de leche de avena hasta conseguir la textura y cremosidad que más nos guste.

Añadimos el helado en un bol y ponemos por encima los copos de avena, las frambuesas y los arándanos.

¡Y listo!