La horchata de chufa fresca, muy fresca, casi helada, es uno de mis placeres del verano!!! A poder ser siempre que puedo, la prefiero “casera” o recién hecha y sin azúcar. Os aseguro que cuando le coges su especial sabor, es deliciosa.
No siempre es posible encontrar horchaterías en las que tengan horchata de chufa recién hecha y sin azúcar, por lo que si lográis encontrar un quiosco o horchatería que la vendan, os aconsejo que la probéis y me contéis que os parece.
Pero en cambio, las propiedades nutritivas de la horchata de chufa se mantienen, sea con azúcar o sin:
Es rica en vitaminas C y E (ambas antioxidantes), del grupo B, y minerales como el hierro, magnesio, fósforo y potasio.
Es una bebida muy digestiva, gracias a su contenido en enzimas digestivas como la amilasa y la lipasa. (Ideal para aquellos que sufren de digestiones pesadas o problemas estomacales e intestinales. Os lo cuento por experiencia propia!!).
No contiene gluten ni lactosa (0%) así que puede ser consumida por las personas intolerantes al gluten (celiacos) o a la lactosa (o leche).
En definitiva, la horchata de chufa es algo más que un refresco de verano, es una bebida supernutritiva y saludable… por lo que es aconsejable para todos, con o sin azúcar!!! ¿A qué esperáis a tomaros un vasito?
Besos desde mi blog!!!