Hotel Iturregi
Está en las afueras de la preciosa localidad de Getaria, en Guipúzcoa. El entorno es maravilloso, en plena naturaleza, en el monte, rodeado de viñedos de Txakoli, con vistas al Cantábrico. Es una pasada, súper tranquilo, con el sonido del silencio, del viento, y los cascabeles de las ovejas que pastan alrededor.
Está construido sobre las ruinas de un antiguo caserío, y como veis, respetando totalmente la arquitectura propia de estas construcciones. Eso sí, las líneas son súper elegantes, y está cuidado al detalle. Tiene unos ventanales enormes, con unas vistas magníficas del mar y la montaña. Se integra prefectamente en el entorno que lo rodea.
Aunque ahora mismo, viendo granizar desde la ventana, me entran escalofríos sólo de pensarlo, tiene una terraza y un porche súper agradables para desayunar, o tomar algo en una tarde/noche de verano.
Los muebles exteriores son de mimbre y de maderas de diferentes clases y formas, súper coquetos, y el porche tiene unos ventanales y un techo de madera inclinado. Lo mismo que la piscina, que incluso conserva un parte del antiguo caserío, y es perfecta para relajarse al sol, (que ganas de que llegue el sol).
El interior es una sorpresa, te esperas igual algo más rustico, pero es súper, súper coqueto, elegante y chic. Pero no pretencioso, ni modernista, no sé, es como una mezcla de estilos, entre clásico y moderno, con un toque francés, que lo hacen precioso y acogedor. Los salones, los comedores, todos tienen un toque especial. Me gusta mucho cuando entras en un salón súper calido, con una biblioteca, chimenea y juegos de mesa. Tiene incluso películas, por si lo que te apetece es no salir del hotel.
Tiene ocho habitaciones, que llevan los nombres de ocho localidades cercanas, (Orio, Zumaia, Igeldo, Zarautz, Getaria, Iturregi, Jaizkibel y Askizu) Cada habitación es única, y está decorada de manera totalmente diferente, tanto los muebles, como las paredes, los complementos, y por supuesto los baños.
El trato es inmejorable, el desayuno muy bueno, la atención al detalle, y en el interior se respira una calma y una paz, que si lo juntamos con el entorno, hace que te relajes desde el minuto uno.
En cuanto al precio, no es barato, pero la relación calidad precio es muy, muy buena, una doble sencilla cuesta unos 200€, depende si es con vistas al mar, al campo etc... Es uno de esos sitios, que lo vale.
Además está al lado del pueblo pesquero de Getaria, que en mi opinión tiene restaurantes donde se sirven ¡¡¡los mejores pescados del mundo!!! Con lo que la buena comida está asegurada.Yo os recomiendo que vayáis al Restaurante Elkano, con un producto, un dominio de la parrilla y una atención excelente; o al Asador Astillero, con un besugo espectacular, o bueno, al que más os apetezca.
Aprovechad para dar una vuelta por el pueblo, (se ve enseguida), y ya como consejo particular, os recomiendo una visita al Museo Balenciaga, que es impresionante, y desde luego se merece un post aparte porque contiene verdaderas obras de arte.
Bueno, ahora mismo se acercan fechas muy románticas, (que yo me niego a celebrar ese día porque sí), así que si este post sirve de inspiración a alguien para sorprender a su pareja, pues mejor que mejor. Y si no, para cualquier otro momento, que para cosas así, cualquier día es bueno.
¡¡¡Hasta pronto!!!