Aquí no es tradición las monas de Pascua y mucho menos los huevos, pero en el colegio de mis hijos, una de sus maestras prepara todos los años una actividad para todo el centro. Los niños deben decorar huevos en sus casas junto a sus padres y llevarlos al colegio. Luego se monta una exposición con ellos y quien quiera puede pasar a verla. Divertido y bonito pero siempre nos pasa lo mismo en casa. Lo dejamos para el último momento y nos toca hacerlo deprisa y corriendo. Además, que no me oiga nadie, se me van acabando las ideas (jijiji), aunque a mis hijos nunca, sean o no viables. Este año tenemos un rey huevo y una primavera mariposil. Muy fáciles de hacer. Eso sí, el huevo primavera lleva su tiempo aún haciéndolo entre dos personas.