Incluso el ganador, Max Verstappen, estaba nervioso mientras navegaba hacia la victoria.
"Pude ver problemas con muchos conductores y nos puso nerviosos", dijo el holandés.
"Vi que Daniel también estaba afuera y Toro Rosso y yo pensamos 'Dios mío, no dejes que eso me pase a mí'".
Daniel Ricciardo estuvo de acuerdo: "Para algunos de nosotros, fue un fin de semana horrible".
Por su parte, las obras del piloto de Renault, Hulkenberg, tuvieron que saltar de su automóvil amarillo averiado con ambos pies para evitar una descarga eléctrica.
"Algo así (México) no debe ocurrirle a un fabricante", dijo al diario Bild, refiriéndose a la salida de Renault en México.
"No es aceptable. No somos lo suficientemente buenos".
Para el alemán, es su sexto abandono este año.
"Todos están enojados, frustrados, decepcionados", dijo Hulkenberg a Auto Motor und Sport. "De alguna manera tenemos que tenerlo bajo control el próximo año".
"El daño se ha hecho este año, pero la fiabilidad es nuestra primera tarea para el año 2018", insistió. "De lo contrario, incluso tener el auto más rápido no nos ayudaría".