El cáncer es el producto de una división celular descontrolada, por ello los investigadores han centrado cada vez más la atención en la vía del hipopótamo, que cuando funciona mal da como resultado una actividad irregular de un par de sus objetivos posteriores, la proteína asociada al Sí (YAP) y la co transcripción, activador con motivo de unión PDZ (TAZ).
YAP y TAZ actúan para regular la transcripción de genes que están involucrados en la proliferación celular. Cuando la vía de señalización de Hiptalamo está activa, YAP se inhibe, desempeñando así un papel en el control de la supresión tumoral. Por otro lado, cuando la señalización de Hipotalamo está inactiva, YAP se vuelve persistentemente activo y promueve la proliferación celular .
Los mecanismos precisos de la activación de YAP - TAZ siguen siendo poco conocidos. Se sabe que el gen que codifica el receptor del factor de crecimiento epidérmico (EGFR), una proteína que ayuda a las células a crecer, a menudo se sobreactiva, especialmente en el carcinoma de células escamosas de cabeza y cuello (HNSCC), y el EGFR a menudo muta y se activa en el pulmón. adenocarcinoma (LUAC).
Como resultado, el EGFR siempre es un objetivo común de las terapias contra el cáncer, ya sea utilizando fármacos inhibidores de la quinasa o bloqueando anticuerpos. Sin embargo, aquí también, si EGFR controla la activación de YAP / TAZ ha sido una pregunta abierta.
Cientificos de la Universidad de Hiroshima y la Universidad de California en San Diego llevaron a cabo una serie de investigaciones de los mecanismos de la vía del hipopótamo, incluso mediante comparaciones de la activación del gen EGFR y la activación de YAP en una serie de células cancerosas HNSCC; células que mostraron la mayor expresión de EGFR entre las células HNSCC; un análisis de todos los tipos de cáncer; y análisis de enriquecimiento de conjuntos de genes (GSEA): una técnica para identificar grupos de genes que están sobrerrepresentados dentro de un conjunto grande y pueden estar asociados con ciertas enfermedades.
Descubrieron que la activación de EGFR promueve la fosforilación de tirosina uno de los componentes centrales de la vía del Hipotalamo, llamado MOB1. Este es un gen que dirige la activación de determinadas quinasas, LATS1 y LATS2, que modulan la función de YAP - TAZ. La fosforilación de tirosina MOB1 promovida por EGFR seguida de la inactivación de LATS1 - 2 conduce a una activación aberrante de YAP - TAZ en muchos cánceres que albergan alteraciones de EGFR como HNSCC y LUAC.
Este eje de señalización EGFR-MOB1-YAP / TAZ puede representar un objetivo novedoso para las terapias contra el cáncer. Además, una combinación de terapia dirigida a EGFR y terapia dirigida a YAP - TAZ podría evitar que las células cancerosas adquieran la resistencia que podría haber ocurrido si solo una u otras terapias se usaran por sí solas.
Aún no se ha aprobado un fármaco dirigido a YAP - TAZ para el tratamiento de pacientes con cáncer sin embargo los investigadores consideran que el desarrollo de un fármaco de este tipo es una prioridad urgente, así como para aclarar el mecanismo desconocido de la reactivación de YAP.
Esta investigación aparece en la revista Communications Biology.