No alabes al sabioy el vulgo no se enfrentara a él.No estimes las cosas difíciles de obtenery no habrá quien se anime a robar.No mires los objetos deseablesy la mente no se turbara.
Por eso, el hombre sabio en el gobierno,vacía la mente y llena los vientres.
Debilita las ambiciones y fortifica los huesos.
El pueblo quedará limpio de conocimientos y deseosy el presumido se abstendrá de actuar.
Actúa sin actuary el pueblo gozara del orden universal.
"No se lanza un pez al árbol, no se pone un ave en el agua" (Huai-Nan-tzu).
La antítesis aparentemente brutal entre pensamiento y voluntad y vientre y huesos se explica pensando que llenar el vientre y reforzar los huesos corresponde a una necesidad natural para seguir viviendo, no así llenar la mente o la voluntad de vanos deseos y de vanos pensamientos.
Lo que se busca es la paz del pueblo; como lo explica Wen-Tzu. (Lo que uno no escucha no le agita la mente).
Tao Te Ching de Lao Tzu