Renault sufrió una campaña desastrosa en el 2015 después de no alcanzar la fiabilidad y el rendimiento que esperaban y que limitó gravemente a los equipos suministrados: Red Bull y Toro Rosso.
La compañía de Illien ha colaborado con Renault y a pesar de que se decidió no usar una mejora que llegó al final de la temporada pasada, el ingeniero suizo sigue esperanzado que su contribución sea importante.
"Progresaremos gradualmente. Espero poder ver progreso desde el inicio de la temporada," explicó Illien a la publicación alemana Auto Motor und Sport, cuando se le preguntó por el potencial de la unidad propulsora.
"Con los 32 tokens [para desarrollo] podíamos cambiar muchas cosas pero el tiempo no lo permitía. Ahora tenemos que ver, en cooperación con Renault, que se puede hacer con el tiempo limitado.
"Depende de las ideas, dónde debería estar el foco y que se puede hacer con el tiempo limitado. Debemos tener un plan, por supuesto, a largo plazo más allá del 2016."
A pesar de su positivismo, Illien admite que les llevará tiempo recortar distancias con Mercedes y Ferrari, los únicos dos fabricantes de motores que han logrado victorias en 2015.
"Eso probablemente nos llevará más de un año, los otros también mejorarán," dijo.
En 2016, Renault suministrará a su propio equipo, después de la adquisición de Lotus por parte de Renault, y a Red Bull, bajo la marca TAG Heuer, mientras que Toro Rosso volverá a usar motores Ferrari.