..En algunos momentos de la historia, se levanta un clamor, un desgarrador pedido de los individuos y los pueblos. Entonces, desde lo Profundo llega una señal. Ojalá esa señal sea traducida con bondad en los tiempos que corren, sea traducida para superar el dolor y el sufrimiento. Porque detrás de esa señal están soplando los vientos del gran cambio.
Cuando hace muchos años anunciábamos la caída de un sistema, muchos se burlaban de lo que para ellos era imposible. Medio mundo, medio sistema supuestamente monolítico, se derrumbó.
Pero aquel mundo que cayó lo hizo sin violencia y mostró las cosas buenas que existían en la gente. Es más, antes de desaparecer desde aquel mundo se propició el desarme y se comenzó a trabajar seriamente por la paz. Y no hubo ningún Apocalipsis. En medio planeta se derrumbó el sistema y aparte de las penurias económicas y la reorganización de las estructuras que padecieron las poblaciones, no hubo tragedias, ni persecuciones, ni genocidios. ¿Cómo ocurrirá la caída en la otra mitad del mundo? Que la respuesta al clamor de los pueblos sea traducida con bondad, sea traducida en la dirección de superar el dolor y el sufrimiento.
Como seres humanos no somos ajenos al destino del mundo. Orientemos nuestra vida en dirección a la unidad interna, orientemos nuestra vida en dirección a la superación de las contradicciones, orientemos nuestra vida hacia la superación del dolor y el sufrimiento en nosotros, en nuestro prójimo y en donde podamos actuar.
Que nuestra vida crezca superando la contradicción y el sufrimiento. Que nuestra vida avance haciendo avanzar a los demás.
En este día de celebración quisiera dar un saludo muy afectuoso a todos los que están aquí presentes y también a aquellos que estando muy alejados en el espacio se encuentran comunicados con nosotros.
Fragmento de palabras de Silo en la inauguración del hoy Parque de Estudio y Reflexión La Reja en Buenos Aires, 7 de Mayo de 2005