El ácido hialurónico, es un componente esencial y muy importante del tejido de las articulaciones ya que afecta a su capacidad de recuperación, elasticidad y fuerza gracias a las propiedades de retención del líquido lubricante en el cartílago y en las articulaciones.
Las infiltraciones intraarticulares de ácido hialurónico en rodillas con artrosis leve o moderada consiguen un efecto lubricante que mejora el dolor y la movilidad. Suelen tener un efecto de aproximadamente 6 meses.