El arte conceptual es una forma de expresión que intenta evitar el estímulo óptico a favor de los procesos intelectuales que el público es invitado a compartir con el artista. Para ello, esta disciplina artística se fija en los ambientes cromáticos, en los luminosos, y en las variaciones sobre la naturaleza.Se considera opuesto a la burguesía y contrario al consumo, dado que la obra no es de nadie.
Aunque tuvo su auge en la década del 60 y 70, sus antecedentes fueron el dadaísmo y el minimalismo. Sus orígenes se encuentran en las obras de Duchamp, dado que él ya establecía que el concepto era más importante que el objeto en sí.
Este arte se manifiesta de diferentes maneras, ya sea con el body art (pintura o alteración del cuerpo humano), el arte povera (hecho con pocos materiales), land art (intervención de la naturaleza), las instalaciones, entre otras. En este ámbito se reconocen a dos artistas del arte conceptual, que usaron tanto las instalaciones como la performance: Joseph Beuys y Joseph Kosut
Joseph Beuys vivió una experiencia que lo manifestó en su arte. Cuando combatía en un enfrentamiento bélico, su avión se estrello en una región de Crimea. Ahí, los nativos lo salvaron de la muerte cubriéndolo con grasa y fieltro, dos materiales muy utilizados en sus intervenciones artísticas.
Existen dos obras muy famosas de él, que son “Como explicar la obra a un conejo muerto” y “Coyote”. En la primera, el artista se pintó la cara con miel y pan de oro y llevaba en sus brazos a un conejo muerto, al cual le explicaba sobre su obra. Aquí quiso representar un intento de salvar y socorrer a una sociedad a quien consideraba muerta. El artista actúa como chaman de sus ideas y, con eso, tiene la intención de curar aquello que no da marcha atrás, como es el caso de la muerte. En “Coyote”, el artista convivió con un coyote por semanas y se filmó a sí mismo, intentando relacionarse con el animal. Aquí utilizó el fieltro, papel y paja, el cual los acumulaba mientras el coyote intentaba atacarlo. Al final, luego de una relación que no comenzó nada bien, termina abrazado al coyote.
Joseph Kosut es otro artista conceptual, el cual considera a Duchamp como los verdaderos creadores de la revolución artística. Para él, el tema artístico es un problema filosófico y lingüístico, el cual lo lleva a un gran interés por el uso de las palabras para la creación de sus obras.
Una de las más famosas, y la que siempre se la usa como ejemplo de arte conceptual, es el “una y tres sillas”. Se trata de una instalación en que colocó una silla de madera, junto con la foto de la misma silla y una definición de silla extraída del diccionario y colocada por la pared. Con esta instalación quiso demostrar que hay varias maneras de representar un mismo objeto. Tenemos una idea de lo que es y la tenemos en nuestra realidad. Otra obra famosa es “fourcoloursfourwords”, en la que utilizó luces fluorescentes que formaban aquella frase de cuatro palabras e iluminadas con cuatro colores, tal como lo indicaba el texto. Se ve claramente cómo con las palabras se refleja la idea y, al mismo tiempo, la vuelve realidad con el uso de las luces, separándolas entre sí y volviéndolas a su individualidad.
El arte conceptual tendrá sus admiradores y detractores pero, a pesar de todo, marcó un antes y un después en la historia del arte. Por siglos se ha tomado el arte como mímesis. En el siglo XIX y comienzos del XX, fueron muchos los artistas que intentaron romper con aquel concepto de arte. Y recién a mediados del siglo XX y por influencias de Duchamp y el dadaísmo, se dio un estirón hacia este arte moderno que hasta hoy genera controversias. Con esto se quiere demostrar que todo es arte en la medida en que se pueda explicar. Sin embargo, no siempre se necesita una explicación para todo. Se debería también que el espectador de la obra lo interprete a su manera, sin tanto concepto.
El problema es que, de tanto concepto que se le da a una obra, la misma pierde interés y significado. Será por eso que muchos rechazan esta clase de arte. Y más porque no le encuentran el sentido de que solo con un objeto ya uno sea considerado un genio. A veces se hace más esfuerzo en el concepto que en la obra en sí. Habría que replantearse en el tema del arte, cómo podemos enfocarlo en la actualidad y si realmente el arte conceptual adquiriría un gran valor con el correr del tiempo. Aunque lo bueno es que, en este ámbito, todo es permitido y solo basta la creatividad de uno para lograr que un objeto cotidiano llame la atención y sea recordado en el ámbito artístico. Por eso es importante registrarlo todo, ya sea con filmaciones o con las fotos. El video de “Coyote” no se encuentra completo, pero al menos existe un registro de él y se puede analizar el acto performático, en el cual da lugar a miles de interpretaciones. Algunos lo aducen a la soledad, otros a la importancia de la relación… en este caso no se necesita que haya alguna explicación. Se puede dejarlo a la interpretación de cada uno, lo cual ése debería ser el objetivo del arte.
Por lo tanto, para finalizar este informe, se podría decir que hay todavía un largo camino por recorrer. El concepto de arte es más abierto que hace siglos anteriores y, con los avances tecnológicos, se puede lograr miles de ideas. Solo basta que uno se lo proponga y lo lleve a la acción, a la realidad.