Ingreso mínimo vital; modificaciones constantes para una ayuda que no llega

Por Pedirayudas @Pedirayudas

Venimos informando desde hace varios artículos sobre las nuevas medidas aprobadas por el Consejo de Ministros para la mejora del Ingreso Mínimo Vital (IMV).

Dichas medidas buscan facilitar y ampliar el acceso a la prestación, para que así llegue a la mayor cantidad de población necesitada posible, esta necesaria ayuda.

Nuevas medidas

Estas son, de manera resumida, las nuevas modificaciones planteadas:

  • Se flexibilizan los términos con respecto a las unidades de convivencia.
  • Inclusión de las personas sin hogar.
  • Se podrá reconocer la ayuda a más de dos titulares por vivienda.
  • Se tendrán en cuenta los últimos meses de ingresos para acceder al subsidio.
  • Los servicios sociales y algunas ONG podrán acreditar mediante informe determinados requisitos para acceder a la prestación.
  • Se reduce de 3 a 2 los años de independencia acreditada, los necesarios para que las personas menores de 30 años opten a la ayuda.

La cuestión es que la mayoría de estas medidas no son una novedad, y muchas de ellas ya se propusieron meses atrás. Además, por necesarias que sean estas medidas, no son suficientes, y no se abordan problemáticas importantes que presenta el IMV.

Los tiempos de espera

Aunque no lo parezca, pronto hará un año desde que el se declaró el primer estado de alarma en nuestro país a causa de la pandemia.

Desde entonces, miles de familias se han visto directamente afectadas en lo que refiere al tema económico. Muchas de ellas, aún no han visto solución alguna a estos problemas. Concretamente, un gran porcentaje de hogares se encuentran esperando alguna respuesta de su solicitud del IMV desde el mes de junio de 2020. Lo que se traduce en más de 8 eternos meses sin recibir, ni respuesta, ni los ingresos necesarios para cubrir sus necesidades básicas.

Llevamos meses escuchando declaraciones por parte del Gobierno de que agilizarán la tramitación y gestión de la prestación, sin embargo, aun no se están viendo los resultados.

También se está cuestionando el orden en la concesión del subsidio. Ya que, personas que han solicitado el IMV recientemente cuentan ya con una resolución mientras hay quienes aún esperan sin noticias desde el verano.

Esto solo hace propicio que la población se plantee las razones de este gran retraso, y si es posible que se deba a la falta de presupuesto para afrontar todas las concesiones de la ayuda solicitadas.

Cuantías insuficientes

Debido a la corta vida de esta prestación, y de los grandes retrasos a la hora de la aprobación de esta, no conocemos datos oficiales por parte de la administración concretos sobre las cuantías reales que están recibiendo las personas beneficiarias. Sin embargo, gracias a los testimonios de aquellos que ya tienen resuelta y aprobada su solicitud, podemos ver que las cuantías concedidas dejan mucho que desear. Y estas resultan insuficientes para garantizar los derechos esenciales de las personas.

Nos encontramos con multitud de casos en los que se les ha aprobado una prestación de menos de 400 euros, incluso de menos de 100 euros.

¿Cómo pueden vendernos que tienen entre manos una renta mínima garantizada, para cubrir las necesidades de aquellos que más lo necesitan, para luego concederles menos de 100 euros al mes?

Desde luego eso nos hace plantearnos que los cálculos para determinar la cuantía a percibir deben de reevaluarse, o quizá es que los presupuestos destinados son insuficientes, y se están racionando las cantidades concedidas. Recordemos que, se aprobaron 500 millones de euros en 2020, y se subió a 3.100 millones en los presupuestos de 2021.

La escasa coordinación con las Comunidades Autónomas

La coordinación con las comunidades autónomas está dando numerosos quebraderos de cabeza. Desde la administración llevan meses asegurando que se trabaja para facilitar la comunicación con las autonomías, y que esto busca la facilitación de los trámites, sin embargo, nada queda más lejos de la realidad.

Actualmente las personas que solicitan el IMV y que, en muchos casos, son beneficiarias de las rentas mínimas, ahora se ven rindiendo cuentas ante dos administraciones. Además en la mayoría de comunidades, se ha condicionado el acceder a una renta mínima autonómica a solicitar y recibir resolución del IMV previamente. Lo que se traduce en familias esperando durante meses, primero el IMV y después si corresponde, la renta mínima de su comunidad, que, en muchos casos también tienen tiempos de espera muy elevados.

En la mayoría de los casos, las comunidades autónomas no pueden dar respuesta al funcionamiento que está teniendo la prestación por parte del gobierno estatal, ya que no tienen acceso a esa información.

Al mismo tiempo, están implicadas en el proceso de tramitación y gestión, lo que lleva a graves confusiones y desinformación. Tanto entre los empleados relacionados como con la población solicitante.

Falta de trasparencia

La escasa información clara y la falta de información es evidente en lo que concierne a esta prestación. Si el tener que esperar durante meses a que te den respuesta alguna sobre la solicitud fuese poco, en la mayoría de los casos, la respuesta que obtenemos al contactar sobre nuestro tramite a la administración, nos deja más dudas que certezas.

Las personas que reciben las resoluciones por parte de la Seguridad Social desconocen en muchos casos por qué les son denegadas, o, en caso de aprobación, de dónde procede exactamente la cuantía que se les ha concedido. Eso, sin mencionar los polémicos estados en la sede electrónica de la seguridad social, que si bien es cierto no son vinculantes ni definitivos. No hacen más que crear dudas e incertidumbre a una población desesperada, por la larga espera.

Tampoco contamos con datos fiables sobre la evolución y las estadísticas de los meses que lleva en marcha esta prestación.

Todo esto suma para que el descontento general se incremente cada vez más y los colectivos más vulnerables sigan sin estar protegidos por el famoso escudo social que se supone, ya está en marcha. Mientras tanto, desde el Gobierno, sigan colgándose medallas a costa de cientos de miles de familias viviendo sin recursos día tras día durante casi un año.