Decir que a Celia le encantó el regalo y a mí me dió mucha alegría ver que puse una sonrisa en su cara, aunque fuese efímera. Sé que la próxima vez que nos veámos (que va a ser muy pronto, seguro) va a ser de nuevo la chica encantadora que siempre fue. Desde aquí mi admiración a ella, a Jose, a Olaya y a Pablo, por esa entereza y esa fuerza que están demostrando.
Cuando te toca tan cerca un caso así, te das cuenta de muchas cosas, de la cantidad de personas que hay esperando un donante y que son demasiadas, de la cantidad de personas que donan, y que nunca son suficientes, y de que mañana puedes ser tu. Así que aprovecho para hacer un poco de campaña.
Y ahora voy a enseñaros la letra y la tarjeta,
Gracias por la visita.
Toñi