¿Injurias?

Por Miguel @MiguelJaraBlog

Parece que no pasó desapercibida la entrevista que me hizo anteanoche Bruno Cardeñosa en su ya mítico programa La rosa de los vientos, como cada vez que me entrevista. Hablamos, sobre todo, de Laboratorio de médicos. El caso es que esta mañana encontré en mi correo una carta que comenzaba así:

“Tengo que decirte que algunas de tus afirmaciones sobre los médicos, me parecieron injuriosas y lamentables, aunque siempre trataras de arreglarlo con un “bueno, todos no”… “en todas las profesiones, abogados, periodistas, etc…..”

Quien me escribe es una persona que ha ejercido la medicina durante 38 años como Profesor Universitario en la Facultad de Medicina de Cádiz y ha trabajado en el área de Cirugía Ortopédica y Traumatología en un hospital gaditano. Ya está jubilado y me cuenta que diariamente veía a algún visitador médico bien de productos farmacéuticos o de productos técnicos para la Cirugía Ortopédica y Traumatología (implantes, placas, tornillos, etc):

“Curiosamente nunca se habla de estos últimos, lo que se les debe, a cuánto tiempo se les paga, lo que organizan, cómo y dónde lo hacen, la FENIM [supongo que se refiere a la Federación Española de Empresas de Tecnología Sanitaria (FENIN)] ahí tienes otro campo de trabajo. Volviendo a lo anterior, JAMAS EN LA VIDA, algún visitador me hizo alguna propuesta llamémosla deshonesta. Que organicen un almuerzo o regalen un libro para el Servicio es una práctica habitual y pienso no tiene nada de anormal ni punitivo.

Ejemplos:

Los bancos te regalan una vajilla si domicilias la nómina o abres un plan de pensiones.

El otro día cambié los neumáticos al coche y me regalaron un balón Adidas y una camiseta.

Los pacientes te regalan desde huevos de campo, quesos, pescado……..hasta whisky.

Por último, tienes que reconocer conmigo que, gracias a la ayuda de la industria farmacéutica y la FENIM, nosotros y nuestros médicos hemos podido asistir a los mejores congresos, participar, exponer en forma de comunicaciones o ponencias nuestra experiencia, cosa inimaginable de otra manera porque los sueldos son irrisorios (otro de los temas que podías investigar ¿ESTÁN LOS MÉDICOS BIEN REMUNERADOS?) y no existen ayudas para estas actividades por parte de la Administración.

Es todo por el momento y celebro, a pesar de todo, haberte oído y conocer tu web y blog”.

Le he contestado que no sólo cité varias veces que por supuesto no todos los médicos entran en el juego del tarugueo, que es como se conoce en el argot de la visita médica al trapicheo de recetas y regalos, sino que destaqué el trabajo de organizaciones como la Plataforma No Gracias o Farmacríticxs. Pocas veces he dicho en público que lo mismo que la Medicina tiene la casa por barrer lo mismo ocurre con el Periodismo, por ejemplo, que nos lo estamos cargando los propios periodistas. Dado que paso unos días en tierras gaditanas, cerca de donde vive este médico, le he propuesto que por favor se lea el libro y si estoy por aquí todavía cuando lo haya terminado (uno de los coordinadores de No Gracias se lo leyó de un tirón en unas horas) nos tomamos un fino y lo comentamos.