Y justo ahí, entre las dos estaciones, es donde he encontrado la inspiración DIY de hoy: un macetero-piña no muy complicado que, por mucho que afuera se instale el otoño, seguirá llenando de verano tu casa, o al menos, el rincón donde decidas colocarlo ;)
En el tutorial original Rachel, su autora y bloguera de "Lines Across", dice una frase que creo que resume la idea de este macetero-piña DIY: "cada vez que la miro, me hace sonreír". Así que... ¿os parece si intentamos conseguir esa sonrisa nosotr@s también?
Y ahora que ya lo tenemos todo, veamos qué pasos debemos seguir:
1. Lo primero de todo... preparar los materiales. Tenemos la maceta, la arcilla o la pasta de modelar, el papel de cocina a mano y preparamos un cuenco con agua.
2. Colocamos la arcilla o pasta alrededor de la maceta y empezamos a modelar teniendo en cuenta que buscamos una forma un poco ovalada, como la de la piña, claro :) Aunque el material es suave y fácil de manejar, Rachel recomienda ir metiendo los dedos en el agua para trabajarlo mejor. Además, nos advierte de que conseguir que la superficie quede totalmente lisa no es fácil, por eso ella se decidió a dejarlo con alguna imperfección, y yo también os lo recomendaría... al fin y al cabo, ¿las piñas no son lisas, no?
3. Una vez que, más o menos, hayamos conseguido la forma deseada, podemos suavizar las imperfecciones y las huellas que hayamos dejado con papel de cocina húmedo. Cuando ya estemos satisfech@s con la forma, lo dejamos secar al aire durante al menos, el equivalente a una noche entera. Antes de seguir, comprobaremos que está totalmente seca presionando en los costados de la maceta, si sigue blando, hay que esperar más, si no, podemos continuar. Opcionalmente, cuando hayamos comprobado que la arcilla o la pasta está totalmente seca, se puede lijar la superficie para suavizarla.
4. Ahora toca pintar la maceta de color amarillo. Se puede hacer con brocha, pincel o esponja, pero también puedes optar por la pintura en espray (si os decidís por la última opción, podéis repasar el mini-tutorial sobre pintura en espray que hicimos con nuestros farolillos reciclados).
5. Calculamos dónde van a ir las líneas de nuestra piña. La idea es que se noten las imperfecciones, que nuestra maceta es handmade, por eso no se utilizan reglas, sino que se calculan a ojo. Con el rotulador decorativo - o para l@s que tengáis mucho pulso, con un pincel fino -, marcamos ocho puntos espaciados uniformemente en el borde superior de la maceta.
6. Empieza a dibujar las líneas. Primero haremos todas las que vayan en una misma dirección y esperaremos a que se sequen. Cuando estén bien secas, partiendo de los mismos puntos que las anteriores, dibujaremos las líneas en la otra dirección.
7. Es el momento de transplantar el aloe o la suculenta que hayas elegido - a mi me pasa como a Rachel, que el aloe me parece la planta perfecta para esta maceta-piña, pero cualquier suculenta quedará bonita :) -. Llenamos la maceta con un poco de sustrato - hasta la mitad, un poco más o un poco menos, en función del tamaño de la planta que vayamos a utilizar -, colocamos la planta, y rellenamos de tierra hasta el borde.
8. ¡Ya está! Tenemos nuestro macetero-piña. Ahora sólo queda lo más difícil... conseguir que no se nos muera la planta (si sois tan torpes con ellas como yo, os recomiendo leeros los consejos de "eHow en Español" sobre cómo cuidar de las suculentas en el interior ;).
Tutorial original @ LinesAcross.comAutora @ Rachel Hinderliter
Entonces qué... ¿ha conseguido este macetero-piña DIY su propósito de retrotraeros al verano y sacaros una sonrisa? Estoy casi segura que sí :) ¿A que dan ganas de ponerse a hacer una ya mismo? Además, ahora que ya hemos aprendido la técnica podemos hacer cualquier otra fruta o forma - o al menos intentarlo, jeje -, como siempre, el límite lo pone nuestra imaginación.
Y hasta aquí llega el post de hoy... es hora de decirle adiós al verano y prepararnos para la llegada del otoño.
¡Os esperamos el lunes aquí y en #DiarioDeco!
¡¡FELIZ FIN DE SEMANA!!