Así con un montón de nuevos planes por delante, llega un nuevo #hometour al blog, y esta vez con un lugar elegante, minimalista a la vez, pero que destila mucha personalidad. Si bien estamos mas acostumbrados a que los espacios clásicos se llenen de tonalidades sobrias, oscuras y deformas voluptuosas, este interior nos acerca en pequeñas pinceladas un lugar elegante, minimalista por su impoluto blanco y de carácter por esos elementos que le rodean.
Una pared de ladrillo (tan envidiada) junto con una iluminación mas romántica a la luz de las velas, le ponen el punto sorprendente al salón, que demuestra ser un espacio funcional, abierto, y sin demasiadas piezas. *Esa es la clave....disfrutar de la estancia sin demasiados elementos.
El resto de espacios, con una clara linea clásica, deja que el blanco juegue protagonismo, y que sin ser demasiado sobrio de color, juegue a complementar el espacio de forma sutil.Sin duda, un resultado magnifico, para que engañarnos, y un lugar que transmite mucha serenidad.Así, no hay mejor forma de llegar al fin de semana, no creéis??
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