La cualidad de internet es la de crear una realidad virtual paralela a la cotidiana, en la que la línea divisoria que las separa se estrecha cada vez más, y en la que se acaba superponiendo, dibujando finalmente una realidad que a la vez que es ilusoria y falseada por el medio emisor, desfigura la realidad cotidiana invadiéndola constantemente de imágenes virtuales para invertir la visión del mundo.
La capacidad de generar y almacenar información en internet complejiza y fragmenta la realidad, con lo cual se divide cada vez más al individuo y por lo tanto las relaciones pierden su cualidad cuantitativa y cualitativa.
El mundo tecnológico crea individuos con una visión distorsionada y falseada de la vida real y fomenta la consecución de seres desprovistos de vida pública al fragmentarse por el uso y consumo cada vez mayor de internet en la vida privada.
El uso lúdico de internet aparte de ser un medio de entretenimiento y de evasión, reduce la capacidad de contestación y de compromiso, con lo cual la conciencia también se ve mermada de sus facultades facilitando de este modo la inactividad y la desidia para la creación.
Podemos concluir, que el uso lúdico y abusivo de internet perpetua el sistema de dominación, crea seres dependientes y fagocita sus potencialidades creativas, destruye su capacidad de análisis y observación de la realidad, y lo reduce a la pasividad que el Poder quiere como súbdito condescendiente y la vez sumiso, en sí, una aberración de la naturaleza que consiente el fomento la consecución y consolidación del Poder instituido como modus vivendi.