Comienzo con esta entrada una serie de posts en los que realizaré un análisis personal de las dimensiones que necesariamente se han de conocer y comprender para poder intervenir en la mejora de las condiciones de habitabilidad de los barrios de crecimiento no planificado o barrios informales, centrando su aplicación en el barrio de Damba María, Benguela (Angola). Para ello, una vez trazadas estas dimensiones a escala global, profundizaremos en ellas a través de un caso práctico en este barrio de Benguela, donde la autora colaboró en el proceso de elaboración del Plan de Recuperación de Damba María, entre julio de 2012 y diciembre de 2013.
1- LA MAGNITUD DEL PROBLEMA URBANO
El análisis de la magnitud de un problema es fundamental para desarrollar respuestas adecuadas. Citando a Juan Rubio del Val: “En la ciudad, lo que no se mide, no se puede conocer“[1].
El informe realizado por ONU-Hábitat en el año 2003, The Challenge of Slums: Global Report on Human Settlements, por primera vez revela datos globales que nos acercan a la magnitud del problema urbano: en torno al 32% de la población urbana del mundo (alrededor de 924 millones de personas) vivía, en 2001, en barrios marginales. Teniendo en cuenta que la mitad de la población mundial se asienta en urbes, podemos señalar que 1 de cada 6 habitantes del planeta sobrevive en tugurios sin luz, sin agua, sin acceso a servicios y/o sin seguridad jurídica sobre los terrenos que ocupan. La mayor proporción de población urbana en estas condiciones se localiza en el África subsahariana (61,7 %), seguida de Asia meridional (35%), Sudeste de Asia (31%), Asia Oriental (28,2%), Asia del Oeste (24,6%), Oceanía (24,1%), América Latina y el Caribe (23,5%), y África del Norte (13,3%)[2].
Naciones Unidas también estima que más de un tercio de la población mundial no tiene cubiertas sus necesidades mínimas de cobijo y residencia. Con respecto al número absoluto de habitantes de tugurios, Asia (todos sus sub-regiones combinadas) domina el panorama mundial, con un total de 554 millones de habitantes de tugurios en 2001 (alrededor del 60 por ciento del total de habitantes de tugurios en el mundo). África tiene un total de 187 millones de habitantes de tugurios (sobre 20 por ciento del total mundial), mientras que América Latina y el Caribe tienen 128 millones de habitantes de barrios marginales (alrededor de 14 por ciento del total mundial) y Europa y otros países desarrollados tienen 54 millones habitantes de tugurios (alrededor del 6 por ciento del total mundial). De acuerdo, también, con el Programa de Asentamientos Humanos de las Naciones Unidas, ONU-Hábitat, para el año 2050 alrededor del 75 por ciento de las personas en el mundo residirán en las ciudades.
La escala de este problema hace inevitable que se convierta en planetario, como quedó patente, ya antes de conocer los datos citados, tanto en la Cumbre de las Ciudades, Habitat II (Estambul, junio 1966), como en la Declaración del Milenio de Naciones Unidas (NY, sept 2000), a pesar de que la mayor parte de estos barrios se encuentran en países en vías de desarrollo. Hoy estamos siendo testigos, aparentemente impotentes, de la avalancha de inmigrantes sobre nuestras fronteras y, frente a políticas nacionales de reducción drástica del gasto en cooperación, el discurso internacional continúa sosteniendo que la solución a largo plazo ha de pasar inevitabemente por promover hábitats adecuados para el desarrollo en sus países de origen. En declaraciones recientes, el líder de la Comisión de la Union Africana, Nkosazana Dlamini-Zuma, defendía que:
"Si nos concentramos en mejorar las capacidades de nuestro pueblo, invirtiendo en él, no tendrán que cruzar nunca más a través de Lampedusa. Podrán hacerlo en aviones y barcos. Y serán bienvenidos” [3].
[1] Juan Rubio del Val, Jefe del Área de Rehabilitación Urbana y Proyectos de Innovación Residencialde Zaragoza Vivienda, antigua Sociedad Municipal de la Vivienda de Zaragoza.
[2] "State of the World's Cities Report 2012/2013: Prosperity of Cities". UN-HABITAT. Octubre 2013.
[3] Cumbre africano-europea, sede de la UE en Bruselas. Abril 2014.
Lampedusa: En octubre de 2013, un barco sobrecargado de refugiados, que en su mayoría huían de los conflictos de Somalia y Eritrea, se incendió y se hundió en la isla de Lampedusa, en Italia. 366 personas perdieron la vida, en lo que ha sido una de las peores tragedias de inmigrantes ocurrida nunca en el Mediterráneo, lo que provocó las llamadas para una revisión de las políticas de migración y asilo europeas.
* Imágen vista aquí