La intoxicación por plomo es una enfermedad muy grave que puede afectar el desarrollo del cerebro del feto y de los niños en los primeros 5 años de vida y puede causar hiperactividad, dificultades de atención y problemas de comportamiento. También puede producir anemia (debilitamiento de glóbulos rojos). Antes de que haya síntomas evidentes, es posible detectar un nivel elevado de plomo en la sangre del cordón umbilical y posteriormente en los análisis de sangre que ordena el pediatra en las consultas normales.
Si vives en una casa vieja es prudente asegurarse de que el pediatra le haga análisis de sangre al bebé para verificar que tiene anemia y que en su sangre no hay niveles elevados de plomo. Cuando la pintura de la casa se deteriora, las partículas que se desprenden caen en los marcos de las ventanas y en el piso. Cuando un bebé de 8 meses que gatea por la casa encuentre alguno de estos residuos quizá descubra que tienen un sabor dulce, por tanto, muy pronto aprenderá a buscarlos y a degustarlos.
Los síntomas por intoxicación por plomo son los siguientes:
- Irritabilidad
- Somnolencia
- Falta de apetito
- Estreñimiento