¿Ira? ¿Agresividad? ¿Violencia?

Por Conócete Y Quiérete
En general, definimos "agresividad" como la propensión a atacar, a destruir, a provocar, a hacer daño a los otros. Es la respuesta a la "ira", una emoción que a su vez es la respuesta ante la frustración, la insatisfacción que sentimos cuando algo no sale como queremos.
FRUSTRACIÓN --> IRA --> AGRESIVIDAD
Sin embargo, no debemos cometer el error de equiparar agresividady violencia, bien se trate de violencia física o de violencia verbal. En realidad la violencia es tan sólo una de las formas de agresividad: la "agresividad activa".Aclaremos esto.
Ira, agresividad y violencia ¿Qué es cada cosa?
En primer lugar, la cólera, la ira, son emociones habituales que todos solemos vivir en mayor o menor medida. En segundo lugar, a menos que permanezcamos impasibles, con “nervios de acero”, lo habitual es que expresemos esas emociones mediante alguna forma de agresividad. Pero ¡ojo! porque existen muchas
FORMAS DE AGRESIVIDAD
Efectivamente, como vemos en este cuadro la agresividad tiene múltiples caras:
La agresividad no sólo se puede manifestar con conductas más o menos violentas, sino que además el destinatario, la “víctima” de la conducta violenta, no tiene por qué ser siempre la misma persona que ha provocado nuestra frustración, nuestra ira.Así, por ejemplo, ¿cuántas veces habremos dicho de nosotros mismos que no somos agresivos (violentos) porque ni se nos pasa por la cabeza pegar a alguien? Pero la realidad es que esto no es del todo cierto. Si cuando alguien nos ofende, nos “abstenemos” de pegarle o de gritarle, en efecto no estamos mostrando una conducta agresiva físico-verbal activa (violenta) y directa. Pero si a continuación nos marchamos dando un portazo, damos un puñetazo en la pared o le gritamos al primero que pasa, entonces sí estamos siendo activamente agresivos aunque de forma indirecta, dando rienda suelta a una agresividad reprimida a través de lo que solemos llamar un “chivo expiatorio”.

De la misma manera, si luego nos dedicamos a hablar mal de esa persona con la intención de dañar su reputación ¿qué estamos haciendo más que devolverle el golpe por medio de las habladurías?Por tanto, antes de presumir de “personas pacíficas” examinemos las verdaderas intenciones de nuestros actos porque es más que frecuente que utilicemos el lenguaje como arma.Y es que la agresión verbal es evidente cuando consiste en insultos, gritos y amenazas, pero … ¿y los reproches, el desprecio, la ironía? Las “bromitas”, los comentarios sarcásticos también pueden impregnar de hostilidad una conversación, cargar el ambiente. Y por supuesto, como ya hemos visto, las murmuraciones, los rumores, los cotilleos, son la forma de agresividad verbal más utilizada ¿por qué? Pues precisamente porque cuesta poco: no requieren que demos la cara.


La agresividad positiva
Finalmente, no nos olvidemos de la segunda parte de nuestro esquema: de la llamada agresividad pasiva, la agresividad no violenta ¿Existe? ¿Es posible?Sí, porque cuando nos negamos a aceptar una injusticia y reaccionamos resistiéndonos de forma pacífica, en realidad también estamos siendo agresivos. Cuando hacemos una reclamación o reivindicamos algún derecho. Cuando nos presentamos a un concurso, a una competición deportiva en la que debemos medirnos con los demás, cuando tratamos de convencer a alguien… también en esas ocasiones estamos siendo de algún modo agresivos.Porque en estos casos la agresividad es sinónimo de inconformismo, de energía, de dinamismo, de audacia. Por eso esa forma de agresividad no sólo es positiva sino también necesariaporque nos sirve para defendernos, para hacernos respetar, para afirmarnos.
Post relacionados:
¿Qué es el chantaje emocional? (ir)Los cotilleos (ir)El síndrome del exceso de información(ir)TEST: ¿cómo te comunicas con los demás? (ir)* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *No te pierdas ninguna de nuestras publicacionesSuscríbete y recíbelas en tu eMailTambién puedes seguirnos y compartirlas en Facebook, Twitter y  Google +