Lo que me parece más singular de este jardín es la diferencia de alturas, tiene zonas a distintos niveles, que lo hace un poco especial. Como el jardín tiene un tamaño considerable, y la diferencia de altura del terreno, el diseñador consigue hacer zonas de jardín con diferentes usos, con cierta facilidad.
Diferentes épocas del año.
El jardín cuenta con una pequeña cabaña para que los niños jueguen, que enlaza la parte superior del jardín con la parte inferior, además de un tobogán que da a la parte más baja del jardín, la delicia de cualquier niño y algunos no tan niños.
Se han creado zonas para descanso cubiertas de césped, un pequeño huerto con bancales elevados, una zona de baloncesto, además de contar con varios árboles frutales y zonas de recolección.
Antes y Después.
El jardín está sobre todo pensado para disfrutar, y pasar tiempo en el, sobre todo con niños. Razón por la que se instalaron también unos columpios.
Mención especial tiene el trabajo realizado para crear los taludes en los muros, haciendo pequeñas terrazas en escala, y consiguiendo suavizar la verticalidad del muro y la diferencia tan acusada de altura entre las distintas zonas del jardín.
Vista trasera de la cabaña y entrada al huerto.
A pesar de las diferencias de altura, y la cantidad de escalones, el resultado final es muy agradable.
Fuente Miller Company