No hay dudas de si esto ha sido exitoso con los motores actuales que alcanzan un estimado 50% de eficiencia térmica, casi el doble que el de la generación anterior de motores.
Mientras que la proeza de la ingeniería es innegable, los fanáticos de la F1 han expresado su descontento con el gruñido bajo, el sonido amortiguado del motor moderno es muy bajo y eso mantiene descontento a la mayoría.
El director deportivo de ls F1, Ross Brawn, tiene el mandato de construir las reglas del motor de la era post-2020, pero Todt ya está advirtiendo que no habrá retorno a un motor atmosférico.
"No será aceptado por la sociedad", dijo Todt en la última publicación de la FIA. "Tenemos la responsabilidad de dirigir una organización supervisada por la sociedad global, y la sociedad global no aceptará eso. "De hecho, estoy seguro de que si usted dijo, 'vamos a volver a los motores de hace 10 años', muchos fabricantes no apoyarían tal movimiento. Estoy convencido de que un mínimo de tres de cada cuatro se iría.
"Además, sabemos que la estabilidad es esencial: en primer lugar, tener la mayor competencia posible, y luego proteger la inversión. No se puede invertir en nuevas tecnologías cada año, no es financieramente sostenible, y ya nos quejamos del costo de las carreras, el de Fórmula Uno - un costo que para mí es absurdo".
"El corazón del deporte todavía estará allí, pero tiene que tomar en consideración la evolución de la sociedad. Cuando vea todo el énfasis que se pone en el cambio climático, en la contaminación, siento que tenemos la responsabilidad de participar. Es cierto que una carrera de Fórmula Uno creará menos contaminación que un avión que va de París a Nueva York, pero debemos ser un ejemplo. Y para ser un ejemplo no podemos permitirnos crear contaminación innecesaria porque es la imagen equivocada", concluyó.