Sin embargo, el finés no vaticina una temporada tan tranquila para los ingenieros de las escuderías, unos ingenieros que, tras reinventar la mecánica para adaptarla al nuevo reglamento, tendrán que lidiar ahora con los potenciales problemas de fiabilidad.
"Mis sensaciones me dicen que no será tan diferente a lo que piensa la gente, pero puede que me equivoque. Con un poco de suerte veremos que es bastante simple", ha dicho en un vídeo de Ferrari en el que conduce un coche de calle de la marca por las calles de Maranello.
"Está claro que para los chicos del departamento técnico resulta complicado construir un nuevo motor, una nueva caja de cambios y todas esas cosas, pero eso no causará un gran efecto en el piloto. Sí que tendremos nuevos botones y nuevas cosas que hacer, pero lo mejor es esperar, ya veremos cómo de fácil es".
Räikkönen también afronta con filosofía la perspectiva de que el último Gran Premio de 2014 puntúe el doble que el resto. "Es lo mismo para todos. Está claro que quizá ayudará a algunos y perjudicará a otros. Gustará a los que ayude. A mí no me importa. Te guste o no, es la norma y no va a cambiar".
Kimi Räikkönen será el protagonista de los dos primeros días de tests de Jerez de la Frontera, pues será el primero en probar el nuevo coche de la Scuderia. Su compañero Fernando Alonso tomará su relevo en las dos últimas jornadas de pruebas.