La ansiedad incrementa el riesgo de sufrir una enfermedad cardiovascular

Por Fat

Según un estudio de la Universidad Tiburg en los Países Bajos que se publica en la revista Circulation de la Asociación Americana del Corazón, se analizaron informes de más de 6.000 pacientes y se descubrió una asociación entre la personalidad ansiosa y los futuros problemas cardiovasculares en los pacientes cardiacos. En concreto, los pacientes cardiacos con una personalidad ansiosa del Tipo D tienen triplicado el riesgo de incidentes cardiovasculares como enfermedad arterial periférica, angioplastia, insuficiencia cardiaca, trasplante cardiaco, infarto e incluso muerte. Según el sistema de clasificación de la personalidad, la Tipo D está marcada por las emociones negativas crónicas, el pesimismo y la inhibición social. Este perfil de personalidad se determina utilizando un cuestionario breve de 14 aspectos que mide la inhibición social y el estado global de ánimo. Los pacientes responden a frases como "soy una persona cerrada" y "me siento infeliz con frecuencia".
Los pacientes Tipo D tienden a sufrir mayores niveles de ansiedad, irritación y estado depresivo en todas las situaciones y épocas y no comparten estas emociones con los otros por miedo a su desaprobación, señala Viola Spek, responsable del estudio. La clasificación alfabética de la personalidad se remonta al reconocimiento del patrón de conducta Tipo A, probablemente el más conocido, asociado con una progresión cardiovascular mala. Los individuos Tipo A son competitivos, se centran en los logros y tienen sensaciones de urgencia y hostilidad. Los investigadores analizaron 49 estudios de personalidad Tipo D y sobre salud cardiaca o psicológica con el paso del tiempo. El perfil tipo D se vinculaba también con tres veces más riesgo de trastornos psicológicos que incluían depresión clínica, ansiedad o salud mental pobre. Los autores del trabajo consideran que tales características de la personalidad podrían proporcionar a los médicos la posibilidad de intervenir antes con un asesoramiento psicológico o de conducta y quizás mejorar los resultados cardiovasculares.
La personalidad Tipo D y la depresión son manifestaciones distintas del malestar psicológico, con efectos cardiovasculares independientes. Los descubrimientos apoyan el uso simultáneo de las medidas de depresión y de la personalidad del Tipo D para identificar a los pacientes de mayor riesgo, concluye Johan Denollet, director del estudio. Los pacientes Tipo D parecen responder de forma diferente al estrés cardiovascular. Esta personalidad se asocia con diferencias en el cortisol y también se puede relacionar con los niveles elevados de inflamación. Además los pacientes cardiacos con personalidad Tipo D podrían ser menos propensos a acudir a visitas periódicas para comprobar su estado de salud.