Durante el desembarco de Normandía en la segunda guerra mundial destacó el soldado alemán Heinrich "hein" Severloh,este soldado de infantería de la 352 división de Normandía destacó en la defensa de la playa de Omaha desde su búnker o nido defensivo como denominaban los alemanes,armado con una MG-42 estuvo disparando desde las 6 de la mañana a las 15 horas,9 horas inenterrumpidas en las que disparó más de 12.000 balas con su ametrallador y otras 400 mientras esperaba el enfriamiento de los cañones con su carabina Mauser,probablemente fue el último en retirarse de la posición defensiva cuando ya estaban casi rodeados y el único que sobrevivió de su grupo en dicho nido. Durante las 9 horas de tiroteo se estima que logró entre 1.000 y 2.000 bajas con lo que se ganó el apodo de la bestia de Omaha beach entre los norteamericanos. Fue capturado poco después y mantuvo en secreto sus acciones en Omaha temiendo ser fusilado,una vez liberado un periodista dio con él y escribieron sus memorias,en las que Severloh confiesa que sufría pesadillas,en especial soñaba con un soldado al que le voló la cabeza con su Mauser.