La boda campestre de Ana y Roberto

Publicado el 01 agosto 2013 por Bodasdecuento

Diario de una cuentinovia

11 de mayo de 2013 – Can Riera de la Pineda

Son las 11 de la mañana, se acerca el momento. Peinada y maquillada me siento a contemplar mi alrededor. Un bonito salón de grandes ventanales con vistas a un prado de un verde intenso. Intento capturar cada momento, cada sensación, hasta que mi mirada se fija en ese bonito vestido colgado de una viga de madera ¡no puedo creerme que al fin te encontrase! Cierro los ojos y  recuerdo ese día tan especial en que Marina me lleva a un sitio muy coqueto y delicado: el atelier de Otaduy. Por aquel tiempo hacía muy poquito que nos conocíamos, sin embargo su dulzura, energía e intuición me cautivaron y rápidamente mis gustos ya no tendrían secretos para ella.  Me dijo: “Conozco un sitio que te gustará”, Marina no se equivocaba.

Siento paz, tranquilidad y sé que va a ser uno de los días más felices de mi vida. Imagino cómo estará quedando el lugar de la celebración, no quiero emocionarme pero sé que será imposible contener las lágrimas cuando vea a todos los invitados, a mi familia, a Roberto que me espera al final del pasillo formado por balas de paja. El verde horizonte, las flores,…

La decoración, los detalles, el gusto por las cosas bonitas, fue lo primero que me enamoró de Bodas de Cuento. Encontré su blog un día por casualidad y probé a llamar. ¡Reunión en la cuentiofi Barcelona programada!

Recuerdo esa tarde  de otoño con un sentimiento muy especial, allí comenzó todo. Nos hablasteis con transparencia, energía y nos trasmitisteis sobre todo muchas ganas, ganas de dar forma a un sueño, nuestro sueño. Nuestras ideas ya no parecían tan alocadas como cuando las contábamos a nuestra familia o amigos, al contrario, se veía en vuestras caras el sincero entusiasmo de un reto, de un nuevo trabajo.  Fue entonces cuando lo supimos… no podríamos haber elegido mejor equipo humano para ayudarnos a crear una ilusión.

Sabíamos que nos ayudaríais a elegir a los mejores profesionales y quién mejor que Sara Lázaro (fotógrafa) y Feel&Film (videógrafo) para sacar la esencia de ese día y dibujar de una forma tan delicada las emociones. En definitiva se trataba de ayudarnos a escribir un párrafo muy importante en nuestras vidas como pareja y todos juntos lo conseguisteis con creces.

Chicos, no podríamos estar más agradecidos. La emoción, las ganas y el sentimiento que ponéis en cada cosa que hacéis os hace diferentes. Aún conservo el recuerdo de esa sonrisa de felicidad, sorpresa y admiración de nuestros invitados al ver cada detalle, no tiene precio.

El resultado de este día tan maravilloso lo podéis contemplar viendo las fotos de este post, es el resultado lógico de un trabajo inmejorable. Aunque dejadme que os diga que eso es sólo una pequeña parte de toda vuestra aportación, hay un trabajo y una bonita relación de meses previos a la boda que hacen más especial si cabe vuestra labor, gracias por los abrazos, la energía, positivismo y amor por el amor que nos habéis regalado.

Como Jovanotti en su canción: “tra mille girasoli, tra tutti quei colori, verso una piccola abbazia, dove ogni giorno che vivrò, ti sposerò” (entre mil girasoles, entre todos esos colores, hacia una pequeña abadía, donde cada día que viva me casaré contigo). Gracias por hacer de esta bonita celebración una forma de sentir y hacer feliz a los demás.

Fotografías: Sara Lázaro

Diseño gráfico: Srta Edwina

Vídeo: Feel and Film

Vestido novia: Otaduy

Pues eso, que queríamos mostraros este post desde otro punto de vista: el de una cuentinovia. Millones de gracias Ana y Roberto por ser como sois y por dejarnos formar parte de esto. Nunca os olvidaremos.