Correr maratones o hacer triatlón. Esta es la historia de dos deportistas alemanes que lo dan todo por encontrar la pasión en su tiempo libre. Ellos recurren a remedios naturales cuando tienen molestias o lesiones. Con las Sales de Schüssler rápidamente vuelven a estar preparados para empezar de nuevo.
--Christian Schön, de 43 años, ex deportista y actualmente entrenador a tiempo completo. Su deporte: el triatlón.
Es una locura cuando después de haber entrenado muchísimo para una competición te sientes muy en forma, pero llega el día antes de la prueba y puede ser que te duela algo: la espalda, la cabeza, etc. Luego, cuando desparece el miedo al comienzo, desaparecen los dolores.
El médico lo tuvo claro, el problema: los nervios.
Muchos deportistas conocemos este fenómeno. Mi terapia contra esto es el llamado esquema de examen con las sales de Schüssler. La noche antes del triatlón hay que diluir 10 pastillas de la sal nº 7, Magnesium phosphoricum, en una taza con agua caliente y bebérselo a sorbos. Por la mañana en ayunas hay que tomar, del mismo modo, la mezcla con la sal nº 5, Kalium phosphoricum. Esto le relaja y te sientes listo para la competición.
El reto del triatlón son las distancias. Por un lado no se puede comer mucho antes de empezar sino pueden aparecer molestias y dolores de barriga. Por otro lado, se necesita mucha energía. Lo que me funciona es: unos días antes de la competición, las sales nº 2 Calcium phosphoricum para más energía y la nº 7 Magnesium phosphoricum contra calambres.
Para los deportistas de resistencia: el "7 caliente" y la sal nº 5 Kalium phosphoricum contra los nervios. Para más energía la sal nº 2 Calcium phosphoricum, contra contracciones la sal nº 7 Magnesium phosphoricum.
--Anne Zanzinger, homeópata, 44 años y madre de tres hijos. Su deporte: maratón.
En algunas maratones en EE.UU suelen dar, con el paquete del inicio, pastillas contra el dolor. Pero eso no es lo mío. No hay nada mejor que pasar la meta y saber que has ganado con tu propio esfuerzo y sin ayudas.
En el colegio odiaba el deporte. Hace 10 años que empecé a andar kilómetros después del trabajo. Al principio, me dolía todo, sobre todo los músculos. Puesto que ya había tratado con éxito pacientes con las sales de Schüssler, probé algunas sales para mí; la pomada nº 3 Ferrum phosphoricum es mi remedio contra lesiones y agujetas. Con la sal nº 1 refuerzo los tendones y articulaciones.
Cuando comencé a correr, mi resistencia no era buena. Pero la sal nº 3 me ha ayudado a mejorar claramente. Entre tanto soy la campeona de Baden-Württenberg en los 10 kilómetros y este año alcancé en la maratón de Estocolmo un tiempo de 3:10,05, el puesto 14. En Estocolmo hacía calor, 36ºC, a pesar de todo lo conseguí fácilmente. Diluí 10 pastillas de la sal nº 3 en una botella de agua y bebía a pequeños sorbos durante la carrera. La razón: la mayoría de corredores beben mucha agua pobre en sodio. Pero como se suda mucho se evacuan muchos minerales importantes.
Tras una carrera bebo una mezcla de 10 pastillas de la sal nº 8 Natrium chloratum y la nº 9 Natrium phosphoricum diluidas en agua. Esta bebida ayuda al cuerpo a mantener su equilibrio hídrico. En caso de contracciones y tensiones tomo la nº 7. A diferencia de lo que se puede pensar, los deportistas no necesitan grandes dosis. Sólo deben tomar las sales regularmente. Entonces funciona, igual que el entrenamiento.
Para los corredores de maratón: nº 1 para fortalecer los tendones, ligamentos y articulaciones. Contra la pérdida de líquido: nº 8 Natrium chloratum y nº 9 Natrium phophoricum.
Las Sales de Schüssler, de venta en farmacias, se pueden encontrar en frascos de 80 comprimidos (PVP aprox. 4’31€) o en forma de pomadas en tubos de 50g (PVP aprox. 9’31€) y son el aliado perfecto de los deportistas para recuperarnos de los entrenamientos y aumentar la energía.
*De venta en farmacias
Más información en www.dhu.es