Christophe Paul
Fiel a su estilo ligero y cinematográfico, nos conduce de nuevo por una historia mezcla de thriller, romántico y policiaco, con sus habituales toques de humor y sorprendentes cambios de escenas y planos.
Constanza es una mujer devota y sumisa, atrapada en un entorno burgués. Su vida le parece perfecta hasta que una primavera más excitante y perturbadora de lo habitual hace que sucumba a una metamorfosis que la arrastra a una rebelión incontrolable.Rodada en Nápoles y Roma bajo la sombra maléfica de la Camorra, el autor ahonda en la opresión de una sociedad machista en la que todo parece superficialmente correcto, en el dinero fácil de los traficantes de droga, los negocios sucios, la corrupción y los lazos internacionales de las diversas organizaciones.Una novela romántica y policiaca que atrapa al lector desde sus primeras páginas, una historia muy actual.
Y después de mucho por fin hice esta lectura que venía posponiendo desde hace tiempo. Me ha sorprendido la pluma de Christophe Paul ya que tiene una narrativa descriptiva tan hermosa que te hace ver la situación como si la estuvieras viendo, ningún detalle se le escapa, incluso hay momentos en que esta descripción llega a la cabeza de la protagonista que se habla a sí misma en voz off en ciertas situaciones dándole más énfasis a lo que está sucediendo.Es una lectura que se hace rápido, es ligera y toda la trama está tan bien hilada que cada situación a pesar de cambiar de escenarios y personajes, se entiende perfectamente.Algo que me gustó es la fuerza que le da a las mujeres dentro de la historia, a pesar de hablar sobre la mafia y contrabando, incluso de la sumisión que las “buenas” mujeres de familia deben tener en sus hogares, o de tacharlas como zorras quizá menospreciarlas por ser gente de empleos inferiores (servidumbre) y sin estudios, las mujeres son de gran importancia en la historia.Constanza cansada de ser sumisa, callada… vestir, hablar, pensar, solo lo que su marido deseaba… de repente tenía pequeños atisbos de recordar quien era, de saber que era sentirse viva y se daba pequeños lujos de probar cosas de las que no tenía derecho, aunque casi inmediatamente se arrepentía y guardaba todo en algún rincón oscuro donde nadie tenía que saber que existían. Pero un día decidió no guardarlo… eso tuvo su consecuencias y en lugar retroceder lo que había avanzado, decidió que era momento de cambiar y tomar las riendas de su vida en sus manos. Con la ayuda de gente que quizá nadie esperaría nada, consiguió vengarse de su marido, de exhibirlos y poner las cosas claras para las autoridades.Al final conseguirá no solo ayudarse a ella misma… de quererse y amarse y jamás volver a permitir que alguien más piense por ella, sino que también cambiará para bien la vida de gente que creyó en ella.Es un nuevo comienzo para todos.Incluso para ella.No puedo hablar mucho sobre lo que decide desmantelar Constanza porque sería spoilear mucho la historia, pero la verdad es que por la forma en que comienza la novela, no me esperaba que diera este giro y fuera por este tema, ya que me sorprendió al ver las características de Constanza.Como ya lo dije me gustó mucho la fuerza femenina que tiene en general la novela. Ya que muchas veces o las ponen como las víctimas y si las ponen como mujeres guerreras es que se ven tan falsas que se ven hasta ridículas. Y por la forma en que está hilada sin duda puedo imaginar los escenarios. El final la verdad es que me ha encantado… si, si, si… *spoiler* final feliz para todos… bueno casi para todos.
Es la primera novela de Christophe que he leído y me ha gustado su forma de escribir que te metes y no puedes parar, y aunque puede ser un poco pesado la descripción narrativa que encontramos al principio (claro hasta que le agarramos ritmo) es que vemos que hace más rica y completa la historia, haciéndola, incluso me atrevería a decir más grafica sin realmente serlo. Una novela que me ha dejado con buen sabor de boca y me ha sorprendido…. Para aquellos que les gusta leer novelas con personajes fuertes y bien estructurados, esta es una buena opción.
Gracias al autor y a todo el equipo de prensa detrás de él por todas sus atenciones y por supuesto gracias por el ejemplar para reseña
Christophe Paul
Christophe Paul se casó con la pintora y artista española Zinnia Clavo. Ellos dividen su tiempo entre Madrid, París y Marbella, donde hacen retiros creativos largos.Actualmente, se dedica por completo a la escritura.
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