La cultura mexicana me apasiona, tal como os comenté en uno de mis primeros post, N por el mundo: México. La vitalidad y la alegría, el optimismo, la cantidad de cultura, la chispa que aportan en todo lo que hacen y por supuesto su mundo lleno de magia. A raíz de esta introducción con sabor a tequila...¿qué será lo que nos tiene preparado Blue Dressed Chef en el post de hoy? Una pequeña pista para chuparse los dedos e ir haciendo boca.
Uno de los mayores tesoros de los que disponemos es el conocimiento, con él puedes hacer lo que quieras y es el mejor arma. Soy una firme defensora de esa frase tan utilizada de: "Nunca te acostarás sin saber algo nuevo", y de todas las ventajas que eso conlleva. ¿Hay algo mejor que viajar y nutrirse de este tipo de conocimiento? Conocer las costumbres con absoluto respeto, cómo viven las personas, la comida, la arquitectura...en definitiva: todo. Viajar, leer, tener inquietudes y el saber, nos hacen crecer como personas.
La cultura mexicana me apasiona, tal como os comenté en uno de mis primeros post, N por el mundo: México. La vitalidad y la alegría, el optimismo, la cantidad de cultura, la chispa que aportan en todo lo que hacen y por supuesto su mundo lleno de magia. A raíz de esta introducción con sabor a tequila...¿qué será lo que nos tiene preparado Blue Dressed Chef en el post de hoy? Una pequeña pista para chuparse los dedos e ir haciendo boca.
La cultura mexicana me apasiona, tal como os comenté en uno de mis primeros post, N por el mundo: México. La vitalidad y la alegría, el optimismo, la cantidad de cultura, la chispa que aportan en todo lo que hacen y por supuesto su mundo lleno de magia. A raíz de esta introducción con sabor a tequila...¿qué será lo que nos tiene preparado Blue Dressed Chef en el post de hoy? Una pequeña pista para chuparse los dedos e ir haciendo boca.