Reutilizar y reciclar son los pilares de la estética Eco-Chic. Dejar de usar un mueble, por ejemplo, no significa desecharlo, abandonarlo en el desván. El objetivo es fomentar la creatividad para dar un nuevo uso a objetos que ya no nos gustan o que se han pasado de moda. Así pues, con un poco de imaginación, podemos implantar el espíritu eco-chic en la decoración de nuestras casas. El último número, por ejemplo, de la revista Habitania nos propone un buen número de objetos inspirados en el "bois flotté", o madera de naufragio, de plena actualidad:
(Vía Decor8)
Maisons du Monde tiene piezas muy interesantes que utilizan esta técnica.
En Melbourne, la diseñadora Anne-Sophie Poirier, del estudio Sasufi, ha realizado el interiorismo del Slowpoke Cafe, creando un muro de madera reciclada proveniente de los desechos de los carpinteros de la zona:
(Vía Diario Design)
Existen muchas empresas que producen mobiliario a partir de madera reciclada, como la holandesa Piet Hein Eek,
¿A que el resultado es sorprendente?