¿Soy yo o la Navidad ha llegado más pronto que nunca?
Abetos, escaparates teñidos de rojo, luces en las calles deseando felices fiestas. Teniendo en cuenta que apenas hace dos semanas que he sacado el abrigo, es un poco desconcertante.
Precisamente hoy quiero contarte una técnica decorativa de alto impacto, que juega al desconcierto y que cada vez más, veo aplicada a diferentes tipologías de negocios. Se trata de la descontextualización, es decir, utilizar elementos que no están específicamente pensados para dicho fin y llenarlos de intencionalidad. El objetivo principal de esta técnica es sorprender e impactar, para anclar el recuerdo de esa imagen a quien esté delante de tu escaparate.
“The first rule of decoration is that you can break almost all the other rules. Billy Baldwin.”
Esta técnica, no solo es un ejercicio fantástico para entrenar tu creatividad (sí, sí recuerda que ser creativo depende de ti), sino también para redescubrir viejos objetos que tenías olvidados y darles ese twist para verlos con otros ojos.
Por ejemplo, se acabó poner flores en jarrones. Teteras, tazas, ollas o hasta botas de agua: cualquier otro recipiente pude ayudarte a causar el impacto que necesitas.
Por otro lado, puedes combina otros elementos como frutas, verduras o elementos naturales. Experimenta, mezcla y arriesga.
En uno de los proyectos que estoy involucrada, Event Crafters, esta es una técnica que siempre tenemos en cuenta. Precisamente en la Guía Navideña “Celebra tu Navidad Creativa” hablamos de decorar la Navidad como nunca te la habías imaginado: en tonos rosas, blancos y negros o por ejemplo utilizando elementos de la naturaleza.
Así que este año, no hace falta que bajes los adornos del altillo ni rescatar el espumillón.
Reinventa y decora sin reglas aparentes, sin rigideces, solo así conseguirás ¡resultados sorprendentes!