Por la tarde los generales Villarroel y Sans Miguel aconsejan a los responsables políticos negociar para capitular y evitar la carnicería. Por la noche algunos consejeros de la Generalidad enarbolan bandera blanca señal de rendición final y entrega de la plaza.Durante esta batalla destacaron gran número de patriotas que murieron luchando en bandos opuestos, que lucharon por lograr una España más justa y más libre, por una España, en definitiva, no sometida al despotismo político. Rafael Casanova, cuya muerte heroica en defensa de Cataluña se ha glorificado falsamente tantas veces desde la mitología nacionalista, realmente no murió entregando su vida a la defensa de las instituciones catalanas; tampoco fue un mártir que muriera resistiendo a las tropas de Felipe V; la realidad es que Casanova después de recibir un balazo en el muslo fue trasladado al colegio de la Merced donde fue atendido con pronóstico reservado dos días más tarde de ser herido, logró escapar disfrazado de fraile del cerco de Barcelona y refugiarse en casa de su hijastro en Sant Boi de Llobregat.Tras caer Barcelona en manos de las tropas de Felipe V, .en 1719 fue amnistiado por el Rey a quien juró acatamiento (el pragmatismo) volviendo a ejercer como abogado hasta retirarse en 1737. Murió en Sant Boi de Llobregat en el año 1743 a la edad de 83 años, un mártir realmente longevo. Casanova fue, por tanto, un burgués de Barcelona que en un momento crítico de la Historia de España, fue puesto al frente de una ciudad,peleó y defendió su idea de España: los fueros y leyes tradicionales austracistas (los fueros), como eran costumbre en la nación española de aquella época. Defendió Barcelona en nombre de esa España y lo hizo con la determinación que le obligaba la responsabilidad de su puesto de "Conseller en Cap" (Alcalde) de Barcelona .
Por la tarde los generales Villarroel y Sans Miguel aconsejan a los responsables políticos negociar para capitular y evitar la carnicería. Por la noche algunos consejeros de la Generalidad enarbolan bandera blanca señal de rendición final y entrega de la plaza.Durante esta batalla destacaron gran número de patriotas que murieron luchando en bandos opuestos, que lucharon por lograr una España más justa y más libre, por una España, en definitiva, no sometida al despotismo político. Rafael Casanova, cuya muerte heroica en defensa de Cataluña se ha glorificado falsamente tantas veces desde la mitología nacionalista, realmente no murió entregando su vida a la defensa de las instituciones catalanas; tampoco fue un mártir que muriera resistiendo a las tropas de Felipe V; la realidad es que Casanova después de recibir un balazo en el muslo fue trasladado al colegio de la Merced donde fue atendido con pronóstico reservado dos días más tarde de ser herido, logró escapar disfrazado de fraile del cerco de Barcelona y refugiarse en casa de su hijastro en Sant Boi de Llobregat.Tras caer Barcelona en manos de las tropas de Felipe V, .en 1719 fue amnistiado por el Rey a quien juró acatamiento (el pragmatismo) volviendo a ejercer como abogado hasta retirarse en 1737. Murió en Sant Boi de Llobregat en el año 1743 a la edad de 83 años, un mártir realmente longevo. Casanova fue, por tanto, un burgués de Barcelona que en un momento crítico de la Historia de España, fue puesto al frente de una ciudad,peleó y defendió su idea de España: los fueros y leyes tradicionales austracistas (los fueros), como eran costumbre en la nación española de aquella época. Defendió Barcelona en nombre de esa España y lo hizo con la determinación que le obligaba la responsabilidad de su puesto de "Conseller en Cap" (Alcalde) de Barcelona .