La FIA anunció sus planes para llevar adelante los cambios en las regulaciones, propuestas inicialmente para 2014, después de que el cámara de la FOM Paul Allen fuera golpeado por una rueda suelta en el Gran Premio de Alemania, dejándolo con una fractura de clavícula y costillas rotas.
A diferencia del límite estándar de velocidad en el pit lane estándar de 100 km/h establecido previamente para las sesiones de clasificación y las carreras a principios de temporada, los pilotos se verán limitados a una velocidad menor de 80 km/h durante la duración de los futuros fines de semana de Gran Premio.
Los Grandes Premios de Australia, Mónaco y Singapur serán las únicas carreras del calendario que sigan con el límite estricto de 60 km/h, debido a la naturaleza de los circuitos.
En una nueva campaña para mejorar la seguridad, el WMSC ha aprobado un reglamento para garantizar que la protección de la cabeza sea usado por todo el personal de los equipos que se vean involucrados en los pit stop de los coches en el pit lane.