La obsesión que tiene la FIA por la seguridad es completamente necesaria en algunos campos pero esta empieza a ser un problemas cuando se resta emoción al espectáculo. Precisamente esto es lo que ha ocurrido con las salidas en mojado tras el Safety Car. Se supone que estas salidas se producen tras el coche de seguridad por que la FIA opina que los neumáticos de lluvia extrema no son lo suficientemente efectivos.
Si esto es cierto, sería algo vergonzoso por parte de Pirelli. Los pilotos y los aficionados estallaron tras lo ocurrido en el Gran Premio de Inglaterra, cuando la salida se produjo detrás del coche de seguridad. Muchos afirmaban que entendían que se aplicaran medidas de seguridad por el bien de los pilotos pero lo de Silverstone fue más allá.
Los aficionados y los pilotos mostraron su desagrado por la forma en la que comenzó un Gran Premio en el que los pilotos sabían perfectamente en que lugar se encontraban los charcos, por lo que podían evitarlos sin mayor dificultad, pero lo que hizo que los aficionados explotaran fue el hecho de que la FIA tardara 8 o 9 vueltas en quitar el coche de seguridad.
El enfado de los aficionados y los comentarios de los pilotos a sus equipos ha surtido efecto. Durante la celebración del Gran Premio de Alemania, el cual tendrá lugar la semana que viene, Charlie Whiting se reunirá con los jefes de equipo para intentar encontrar una solución que agrade a ambas partes, según ha dicho el medio Auto Motor und Sport.
Este medio alemán, asegura que la idea que tienen en mente es que los coches salgan tras el coche de seguridad hasta que las condiciones de pista sean seguras y después los monoplazas volverían a sus posiciones de parrilla para hacer una salida normal.