La gulpa de la chulapa

Por Emilienko

-¿Entonces sabe ya lo que le pasa a mi coche?
-Es muy simple. Su coche tiene rota la gulpa de la chulapa.
-¿La gulpa de la chulapa? No lo había oído nunca. ¿Eso donde está?
-No es una pieza muy conocida. Está situada entre el sobreguyador y el cable de la platina.
-Ya. ¿Y se puede arreglar?
-Eso es decisión suya.
-¿Mía? Pues no sé. ¿Usted qué haría?
-Eso no se lo puedo decir. La decisión debe ser suya. Es lo que se llama "Principio de Autonomía".
-¿Qué pasa si no la arreglo?
-Allá usted.
-¿Puedo tener un accidente?
-Hombre, yo no sé qué le va a pasar en el futuro. Pero podría tener un accidente con la gulpa de la chulapa rota, sí.
-Entonces creo que prefiero arreglarla.
-¿Está seguro?
-Pues...
-Entonces firme este largo papel lleno de tecnicismos mecánicos incomprensibles.
-Perdone, aquí dice que...
-¿Sí?
-Que durante la reparación usted puede usted dañar el motor y dejarlo inservible.
-Es cierto, eso puede ocurrir.
-Pero, ¿es frecuente?
-Bueno, ocurre una vez de cada diez millones de veces. Pero tiene que saber que le puede pasar.
-Y si me pasa, ¿tendría solución?
-No. Si le pasa, tiene que cambiar de coche.
-Y también dice aquí que, si usted se equivoca cambiando la gulpa de la chulapa, el coche podría fallar en cualquier momento y causarme un accidente mortal.
-Eso sería muy raro.
-¿Ha ocurrido alguna vez?
-Que yo sepa no. Pero tiene usted que firmar que yo le he advertido de esto.
-Pero yo sólo venía a revisar el coche y usted me tiene que hacer una reparación sencilla. Ahora salgo lleno de miedo.
¿Les resulta familiar la situación? Tardes maravillosas con Juanlu y Laura, con quienes siempre se puede hablar de cuando los intocables Principio de Autonomía y Consentimiento Informado se vuelven absurdos.