(c) Boris Savelev
Pero cuando la historia se sucede en vertical como nos muestra un maestro de la fotografía vertical como Boris Savelev, se entabla otra historia.
(c) Boris Savelev
De esa manera, comenzamos a desplazarnos sigilosamente entre líneas repentinamente cortadas, recorridos inverosímiles, texturas irregulares y colores mínimos.(c) Boris Savelev
La compleja relación entre fotografía y verticalidad nos lleva al interior de una imagen como si se tratara de un reducto propio, nuevo, poco explorado del lenguaje visual.(c) Boris Savelev
Y en esa dinámica interna, la mirada de autor cobra otra dimensión, más imaginada, más ficcional.(c) Boris Savelev
La verticalidad, de alguna manera, nos introduce en una historia no contada en su totalidad y en ese “riesgo provocado” se encuentra mucho del misterio de una buena fotografía.
(c) Boris Savelev
Quizás, allí, en ese mundo, radica el magnetismo de ciertas imágenes que no podrían ni quieren relacionarse en horizontal: en el mundo que normalmente vivimos.Hasta pronto!Si este post te ha parecido útil, cómprame un café!