[ Vía: WebMD ]
Una nueva revisión de más de 280 estudios publicados entre 1966 y 2009 ha revelado que los niños que toman el pecho tienen un 60% menos de probabilidad de morir por el Síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL) que aquellos que no fueron amamantados. Este efecto protector es mayor cuanto más prolongada sea la lactancia materna exclusiva.
Según la doctora Fern Hauck, investigadora del departamento de medicina de familia de la Universidad de Virginia y autora de la revisión que se publicará en julio de 2011 en la revista Pediatrics, "la lactancia materna, se dé en exclusiva o no, y se prolongue lo que se prolongue, protege contra el SMSL".
Sin embargo, el amamantamiento en exclusiva, sin la utilización de leche artificial, proporcionaría los mayores beneficios ya que el riesgo de SMSL entre los bebés que disfrutaron de lactancia materna en exclusiva fue un 73% menor.