Al abrir la puerta de la perrera, descubres la riqueza de lo intangible, el valor de lo inmaterial en la escasez de lo material
Al abrir la puerta de la perrera miradas llenas de amor y esperanza se clavan en ti, te traspasan hasta tocarte el corazón, antes de que casi hayas puesto un pie dentro te ves completamente rodeada.... rodeada de cariño desinteresado
Los más lanzados, aquellos que por su carácter o por la tranquilidad que da la experiencia se acercan a tí, buscan tus manos, ya saben de las caricias, buscan el contacto humano ( del humano que hace honor a su nombre), buscan palabras, mimos …. y alguna golosina
Pronto todos o casi todo, porque siempre hay alguno que aún no confía del todo ( motivos no le faltan), reclaman tu atención, buscan juegos, unos lo han descubierto allí, otros echan de menos los que compartían con los que ellos creían su familia
Es igual de triste como reconfortante ver a un viejito jugar .
En la protectora se intercala limpieza con caricias,se mezcla pienso con juegos, medicinas con dosis de cariño, porque tan importante es la pastilla como la caricia
Después de un grupo, empieza el mismo círculo con el siguiente, aunque siempre hay algún perro que necesite mas cuidado, mas cariño, mas confianza
Pasan los minutos cargados de trabajo y de amor y después de cuanto? una hora? Se vuelve a cerrar la puerta de la compañía para los canes
Un recuento rápido, limpieza, pienso y agua para todos, unas pocas caricias y abrazos por cabeza y algún juego que otro, a ti te persigo, a ti te lanzo la pelota... a ti te hago la foto para difundirte estate quieto para que salgas bien guapo
Quizás ahora te estés preguntando cual es la lección del perro de la protectora , no lo has adivinado???
LA ESPERANZA
El ejemplo que nos dan cada día , ser felices a pesar de las limitaciones de una perrera, saber perdonar a pesar de las cicatrices que marcan su cuerpo y/o su corazón,
Lecciones de amor incondicional
Triste verdad... el abandonado, el herido, el maltratado viejito o cachorro nos enseñan cada día que la verdadera riqueza no se puede guardar en la cartera.... ( aunque la otra tb es primordial para que se pueda seguir), lo verdaderamente valioso es saber ser feliz con lo que se tiene , y esa lección nos la enseñan a diario los perros de protectora