Hay tipografías con tantos diseños diferentes como podamos imaginar. ¿Por qué no convertirlas en pieza de arte o integrarlas en el interiorismo?
Mas allá de su función original, tenemos infinitas posibilidades de color, tipografía, composición, tamaño, etc... dando un toque muy especial en cualquier estancia o rincón.
(via giveawayblabs.com) Con aires de aquel Pop Art que elevaba a pieza de arte el objeto de consumo cotidiano, pasan de ser elementos de comunicación, a piezas con valor en si mismas, por su tratamiento y enfoque.
El diseño de muebles tampoco es indiferente a la tipografia. En estos dos ejemplos vemos como el diseño las integra en su totalidad.
Esperamos que esta clase de ortografía aplicada haya sido de vuestro agrado... besos a tod@s!!!