- Los plazos son estrictos. Si el trabajador enfermo se coge el alta hoy, el sustituto mañana ya no trabaja. Habría que mejorar el mecanismo de aviso del alta y del cese para evitar jugar con el profesional y que pueda organizar su vida sin problemas.
- Todos conocemos casos de magníficos profesionales interinos que 12 años después son cesados en un traslado. Los pacientes se quejan (con razón), pero la normativa es clara y tajante (con lo bueno y lo malo que implica). En este caso, sería conveniente mejorar los procesos de selección y hacerlos cada año, sí o sí, como ocurre en educación. Y otro día hablaremos de si las actuales oposiciones son la mejor forma de seleccionar profesionales sanitarios.
- Los directivos y los políticos deben tener en cuenta que detrás del gasto en recursos humanos hay personas y familias.